El domesticador

8.8.21



Guardó la mentira en un bolsillo de su americana y cada vez que metía la mano sentía dolor en los dedos por su mordedura. Decidió entonces alimentarla con certezas y la domesticó. Ahora sus mentiras son mansas y ya no muerden a nadie.



Retornos

7.8.21



Sales de la infancia y después todo es un volver a mirar hacia ella.




Cogidas

6.8.21



Siempre la vida nos lleva por delante.



Inexperiencia

5.8.21



Si algo me ha enseñado la escritura es a ser humilde, a vivir sencillamente.



No hay que perder la fe

4.8.21



Daniel L. Everett, un misionero y lingüista que viajó hasta la Amazonia con la intención de estudiar la lengua de la tribu piraha y traducirles el Evangelio, descubrió que sus pobladores no tenían pasado ni futuro ni números y eran felices. Everett terminó por ser ateo.



Asentimientos

3.8.21



Aceptar cuanto antes el sufrimiento como parte de nuestra naturaleza humana es reconocernos en nuestra totalidad.



Peyorativo

2.8.21



Me animó a decirle la verdad a la cara después de haber hecho aquel comentario. 

—¿Realmente crees que ha tenido una buena vida? 

—Sí —me respondió con rotundidad. 

—No, porque nadie le amó. Ni hijos, ni mujer, ni todas esas prostitutas pagadas en mil prostíbulos. Su historia es la historia de una soledad iterativa.



Aislado

1.8.21



Encerrado en su torre el pensamiento se le volvió de marfil.




Auxilios

31.7.21



Las redes sociales son el amparo ante la desolación del mundo editorial.



Deslumbramientos

30.7.21



A veces se me nubla la realidad y no sé dónde estoy. Al instante, recuperada la conciencia, contemplo mi existencia y no entiendo qué hago aquí.




Amnésicos

29.7.21



El olvido es ingrato y la desmemoria infiel.



Audaces

28.7.21



Quién pudiera escribir sin miedo a terminar una frase.



Planeos

27.7.21



Y la vida se va como un pájaro que echa a volar y ya no vuelve.




Aleccionados

26.7.21



Fui un joven responsable: amé, bebí, me divertí, y holgazaneé. Ahora soy un padre sensato y pido a mis hijos responsabilidad. No hay ninguna contradicción, solo son lecciones de vida.



Iliteratos

25.7.21


Provskoye es un pueblo donde todos sus habitantes son analfabetos y nadie sabe leer ni escribir. El nueve de enero de 1869 del calendario juliano el termómetro marcaba menos catorce grados centígrados, pero como la vecindad no conoce los números no entienden muy bien si hace poco o mucho frío. Se arropan por la costumbre del invierno.

Las casas de madera con sus techos azules y rojos cobijan a numerosos pobladores aunque por la soledad siberiana de sus calles parece lo contrario, un lugar desérticamente blanqueado por la nieve y pintado de álamos negros y abetos.

Entre los aspectos más desoladores está el hecho de no recibir cartas porque nadie las escribe y si llega alguna nadie puede descifrar sus grafismos, por lo que el papel es utilizado para encender las estufas de carbón, igual que el de los pocos periódicos que pueden dejar estrafalarios viajeros. En toda la zona no existe libro alguno y sus moradores desconocen a los grandes genios literarios y sus obras.

Tampoco existe un registro de la propiedad y se da por sentado que la pertenencia es la que es, sin ponerla en duda, porque lo que es de uno es de uno y no es de los demás. Los medicamentos son marcados con ideogramas para no confundirlos.

Nadie puede leer la Biblia y por tanto cada persona reza para sí lo que entiende o quiere sin tener que edificar iglesia alguna. Niños, mujeres y hombres, están igualados en ignorancia.

Su historia no está escrita y sus gentes cuentan oralmente los sucesos más importantes que se van perdiendo con el paso de las generaciones en sus trescientos años de existencia.

Viven de trabajar la tierra cuando el clima lo permite y cuidan de sus caballos que les sirven para ir a comprar provisiones al poblado vecino que se aparta medio centenar de kilómetros.

Una tarde de finales de verano, las nubes esparcidas sobre la estepa del cielo que repartía una luz difusa, algo sorprendente ocurrió. No se trataba de la llegada de la luz eléctrica que aún no estaba inventada o de la máquina de escribir, tampoco la venida de un vehículo con motor de gasolina. No era una gran autoridad ni un profeta.

En el alejado horizonte sobre su montura, lentamente una figura se fue haciendo mayor hasta llegar a la altura de dos aldeanos eternos.

—Es el maestro que viene al pueblo —advirtió el primero.

—Se acabó la tranquilidad.


 

Desaceleraciones

24.7.21



El ser humano, a pesar de ser consciente de su aceleración física y mental en todo momento, no sabe detenerse, frenar esa inercia que lo lleva todo el tiempo tensionado.



Universidades

23.7.21



Más sabe el diablo por viejo que por haber estudiado en Harvard.





Crematístico

22.7.21



Cuando los precios están por las nubes es difícil ver el valor de lo que compras.



Elevaciones

21.7.21



Solo si escalas una montaña de libros tendrás altura de miras.




Menciones

20.7.21



Cuando realices una autocita debes tener en cuenta si eres original o solo un plagio.



Sin disyuntivas

19.7.21



Afirma Guy Debord en su libro ‘Panegírico’ que «las citas son útiles en los períodos de ignorancia o creencias oscurantistas». Ambas caben en este tiempo incomprensible y bárbaro.



Retornada

18.7.21



Nos conocíamos desde la época escolar y le perdí el rastro en la universidad. Había regresado a la ciudad tras medio siglo ausente, sola y enferma. Tenía dos hijas pero estaban lejos, una trabajaba como doctora en Suecia y la más pequeña, pintora, vivía en Nueva York (la gente, ya se sabe, tiene preferencia por vivir en los lugares más insólitos). 

La vi sentada en el porche de su casa y apenas la reconocí. Había vuelto después de enviudar. Fue ella la que me llamó la atención: 

—Sigues igual, no has cambiado nada. 

—Ni tú tampoco— le mentí, consciente de que mi mentira le sentaría bien. 

No era la misma, es más, su rostro no guardaba recuerdo alguno de juventud. Incluso llegué a dudar sobre su identidad hasta que fue desgranando un manojo de anécdotas que derribaron mis vacilaciones. Perdía vista y se estaba quedando ciega a pasos acelerados. Leer era lo que más añoraba y ya no lo podía hacer, por lo que le propuse usar audio libros, algo que rechazó porque no se llevaba bien con la tecnología, así que acordamos que pasaría algunas tardes a realizar una lectura de los libros que más interés le despertaran. Me pidió nombres, sobre todo de mujeres: Matute, Beauvoir, Bazán, Highsmith, Gaite, Lessig, Zambrano, Berlín… Los textos fueron cayendo como fruta madura.


—La lectura que realizo ahora es este mismo relato—. Ella entonces detuvo mi lectura. 

—¡Alto! ¡alto! ¡alto! Eso que haces es muy borgiano y aunque es un escritor a quien admiro soy más de escuchar Cortázar pero sin frenillo en la voz. 

—No puedo hacer nada porque el relato se está escribiendo solo.



Mercadotecnia

17.7.21



Los vendedores de humo lo envasan al vacío.



Dimensiones

16.7.21



La prepotencia otorga un gran espacio al ridículo.




Vita flumen

15.7.21



Ahora mismo soy quien escribe, pero mañana qué puedo ser, ¿memoria borrada? ¿ser de olvido? ¿nada que recordar?




Platonismos

14.7.21



¿Si la ignorancia es una enfermedad, el conocimiento es saludable?



Solaz candor

13.7.21



«La ingenuidad es la más peligrosa de las revoluciones» y, con ingenuidad, me pregunto: para quién.




Cristalografía

12.7.21



El pasado es un déjà vu del futuro.



Tú ponte en mi lugar

11.7.21



Fui a visitarlo al hospital después del grave accidente que había sufrido al quemarse en una explosión de un cuadro de luces donde trabajaba. Tras preguntarle cómo se encontraba me contestó: «esto es para mí». 

Entonces le pedí que desalojará la cama y su dolencia y me puse en su lugar. Y, efectivamente, lo miré tendido y sentí su dolor, desesperante y profundo. Ahora él me sonreía feliz. 

En ese instante llegaron unos familiares a visitar al paciente que ignoraban lo que estaba ocurriendo y comenzaron a hablar. Conversaban hasta por los codos de trivialidades y como no me podía mover del lecho por las heridas, mi amigo me dio de beber agua con una pajita y me secó la boca con un pañuelo de papel. Después continuó hablando, alegremente, con las personas que habían ido para saber sobre su salud. Divagaban sobre mi aspecto deteriorado por las quemaduras y lo mal que debería estar pasándolo, no sin darme todo tipo de ánimos. 

Al poco llegó una enfermera y me tomó la temperatura, miró mis constantes vitales y me proporcionó la medicación, mientras comprendía, cada vez más, por lo que pasaba. Después entró el doctor y mandó desalojar la habitación del personal innecesario. Se marchó, según creí escuchar, a la cafetería a tomarse algo con los parientes. 

Desde ese momento llevo cuarenta días hospitalizado y él no ha vuelto ni para que le den el alta.



Ferretería

10.7.21



El ex clavo se convirtió en martillo.



Hipoacusia

9.7.21



Si las paredes escuchan ¿por qué hay sordos como una tapia?



Inamovibles

8.7.21



Antes la mayoría de la gente vivía en la ignorancia, ahora vive en la amargura de saber y no poder cambiar nada.



Cambio de tercio

7.7.21



Me gusta ser amable pero tengo la suficiente edad como para ser, en ciertas ocasiones, desagradable.



Aprensivos

6.7.21



¡Qué miedo me da el destino de algunas personas!



Resurgido

5.7.21



Nadie muere dos veces de la misma muerte.




Incontable

4.7.21



—¡Rápido! Que venga el cuentero.
—¿Qué ocurre? ¿A qué tanta urgencia?
—Necesito escribir un microrrelato y no se me ocurre nada.
—Pues el narrador de historias está de vacaciones.
—Qué ruina de vida, sin nada que contar.



Espanto

3.7.21



Alguien me ha dicho que se ha asustado al verme. Es el primer paso antes de terminar por convertirme en un fantasma.



Apeados

2.7.21



Esa es la vida del artista: estar descolgado de toda la realidad circundante, excepto la del Arte.



Desembolsos

1.7.21



La ingratitud es la moneda con la que pagan los espíritus fatuos.



Exhumación

30.6.21



¿Dónde estarán los cadáveres de las palabras que borramos?




Sobrepasados

29.6.21



Normalmente el necio se ríe de lo que no sabe porque se ve superado por lo que desconoce.



Química

28.6.21



La vida es un experimento en cuya probeta vuelcas diferentes experiencias buscando una fórmula que te haga vivir feliz y que se precipita en un fallo al final.



Rayajos

27.6.21



La doctora me dio dos recetas tras de escuchar mis achaques y de reconocerme. Me dijo que mi padecimiento carecía de importancia pero que tomara aquellas gotas antes de dormir y las pastillas una después de cada comida. Lo expresó sin mirarme a la cara en tanto rellenaba con rapidez las instrucciones para la farmacia que me entregó en mano cuando cerró el recetario, el cual me quedé mirando mientras pensaba cuanta farmacopea estaba anotada en las copias de calco allí guardadas. 

Me despedí de mi médica agradeció por la atención prestada y al salir de la consulta no me pude resistirá ver qué había escrito en la receta. Las rayas anotadas no se correspondían con ninguna grafía compresible para mí y esa falta de legibilidad me imponía bastante respeto. ¿Por qué los médicos no escribían para que todo el mundo pudiera entender lo que recetaban a los pacientes? ¡Qué rayos eran aquellos medicamentos y a qué sabrían esos brebajes! Afortunadamente la boticaria parecía interpretar la escritura de trazos sin dificultad.



Atribulados

26.6.21



Te vas hacia adelante y es utopía; miras hacia atrás y son recuerdos. El ahora es un páramo desolado.



Narratología vital

25.6.21



El narrador que nos narra cuenta una historia errante de titubeantes pretextos.




Distinciones

24.6.21



No hay que medir el triunfo por los logros personales sino por la satisfacción que otorgamos a los demás.




Alegato de la vaciedad

23.6.21



Soy una pequeña nada frente a la gran nada. Nada me inquieta.




Palabrero

22.6.21



A menudo tengo la sensación de que soy un locuaz parlanchín. Luego me dicen que no, que soy más bien un tipo callado. Es por este incesante monólogo interior.



Pedagógicos

21.6.21



Nadie debe dar lecciones de vida porque cada vida es una lección.



Cuento chino

20.6.21



Mientras mamá preparaba el flan yo miraba con atención el colorista dibujo del mandarín y su coleta de tamaño colosal, como cantaba el coro infantil en el anuncio de la radio. Me imaginaba la vida de aquel hombre sonriente llevando el exquisito y tembloroso postre a sus hijos, igual de amarillos que él, viviendo tras la gran muralla vestido con su chaqueta de seda roja. Si los chinos tenían los ojos cerrados era porque estaban estreñidos, según contaba tía Carmelina de comer tanto arroz, pero aquel hombre llevaba un dulce a su familia que debía ser numerosa, porque los chinos eran muchos, más de mil millones según mi hermano mayor. Creo que me gustaba el flan por las dulces historias que sospechaba en cada cucharada.



Fisuras

19.6.21



Un aforismo es una grieta en la dureza del pensamiento acorazado.



Elucidario

18.6.21



Un fino hilo de inteligencia en la madeja del corazón: un huso para desentrañar el mundo.



Admiraciones

17.6.21



Cioran destaca que «cuando Pirrón dialogaba con alguien, si su interlocutor se iba, continuaba hablando como si no hubiese pasado nada. Sueño con esta fuerza, de indiferencia, con esta disciplina del desprecio, con una impaciencia de trastornado». Indiferencia, desprecio, impaciencia, cualquiera diría que tan excelso catecismo de apatía y vilipendio tenga que ver con un autor con tantos libros escritos a sus espaldas.



Peticionarios

16.6.21



No pido mucho, casi nada, y aun así me parece que pido demasiado.

Faustos

15.6.21



Siglos atrás, cuando los seres humanos no tenían la obligación de ser felices, eran más dichosos que ahora.



Enfrentados

14.6.21



Frente al dolor, resistencia; frente al temor, inteligencia.



Amo

13.6.21



Todas las noches salía a pasear el perro a la misma hora, por el mismo itinerario. Enjuto y timorato era impulsado por el corpulento animal. Se paraba en la única farola de la calle, caminaba quinientos pasos hasta el contenedor, se santiguaba frente a la antigua ermita quemada por un rayo y se lamentaba por no haber nacido perro antes de volver a casa.



Golpes bajos

12.6.21



No son malos tiempos para la lírica, no nos engañemos, nunca lo han sido. Este áspero mundo a la poesía le tiene poco aprecio.



Gratuidades

11.6.21



No esperes nada de nadie —me dijo— y, a pesar de ello, habrá gente que te lo dará todo por nada. Esas son las gentes las necesarias.




Plenitudes

10.6.21

 

El pesimismo es una esplendidez de juventud.



Sin límites

9.6.21



¿Existe el infinito?




Insanos

8.6.21



«De algo hay que morirse», confiesa tan vital como vividor cuando se le advierte que tal o cual práctica en perjudicial para su salud. Algo que me trae a la memoria lo que comentaba Robert Walser: «A quienes conservan el sano juicio les hago el siguiente llamamiento: no leáis siempre y de manera exclusiva esos libros sanos; acercaos un poquito a la llamada literatura enfermiza, de la que tal vez podáis sacar un consuelo vital. La gente sana debería arriesgarse siempre de una u otra manera. ¿Para qué demonios, si no, conservar el sano juicio? ¿Para morir un día saludablemente? Vaya un futuro desolador».



Irresoluciones

7.6.21



No sé qué es más terrible si la espantosa muerte cotidiana o el beso del olvido.



Componedor

6.6.21



Lo llamó el señorito.
—Dígame, don Carlos.
—¿Te gusta Enriqueta?
Aquiles se encogió de hombros con la cabeza gacha.
—Es una buena sirvienta y podría ser mejor madre y esposa.
—Si usted lo dice don Carlos, así será.
—Te veo poco entusiasmado con la idea.
—No se me había ocurrido y así de sopetón, la noticia…
—Pues no se hable más. Viviréis en el cobertizo y formaréis un hogar.
Don Carlos acostumbraba a disponer las cosas a su favor. Aquella componenda le proveería de futuras generaciones de sirvientes. Así es como se hacía progresar el mundo, compatibilizando fortunas y destinos, evitando sobresaltos y quebrantos sociales. Sin ir más lejos, su hija Delfina, estaba acordada con el notario, sumando dos suntuosas dotes. Cada oveja con su pareja, solía decir. Y yo el pastor que los guía, pensaba. Respecto al amor, eso era una cuestión de artistas vagos y su loco extravío el de estar contra estos tiempos tan pragmáticos.




Exitosos

5.6.21



El triunfo está en saberse fuerte en la debilidad, sensible ante lo indiferente y digno frente a lo abyecto.



Nuevos paradigmas

4.6.21



«Un artista nunca termina realmente su trabajo, simplemente lo abandona», afirma Paul Valéry. La escritura digital va mucho más lejos porque nunca lo desatiende ni lo concluye definitivamente.



Volatineros

3.6.21



A Tarzán lo recuerdo saltando de liana en liana para atravesar la selva y sin una red de seguridad debajo. Esa prodigiosa destreza se sustentaba en no dejar una cuerda hasta coger la siguiente. Pocas personas son capaces de soltarse sin tener algo agarrado. Es la aventura del vacío y la caída libre: el triunfo o el fracaso.



Inferencias

2.6.21



Si eres incapaz de entender la lógica emocional de los demás, no esperes nunca que comprendan la tuya.





Invocaciones

1.6.21



Hay personas que verbalizando muchas veces el problema irresoluble que tiene este se resolverá por ello.




Vetos

31.5.21



Quien imagina se enriquece de un mundo vetado a la gente pragmática.




Nerdos

30.5.21



Hay poetas que viven en su torre de marfil, entre objetos de marfil y escriben versos de marfil. Pasean solitarios, en soliloquio, por sendas de elefantes, alimentándose del amor que se propician a sí mismos. En su pensamiento ebúrneo desprecian el género humano por no estar a la altura de sus dioses pajizos, sintiéndose incomprendidos y presa de caza valorada por la insidia social. Y al final, solo son una figura decorativa marfileña más en el estante de la vida.


A la contra

29.5.21



Mi pensamiento es de uno contra el mundo: tampoco es que eso importe mucho.




Entendimiento

28.5.21



Más que las reglas ortográficas me preocupan los principios de la comunicación humana: que me puedan entender.




Idioma

27.5.21



Miles de lenguas se hablan en el mundo y el único dialecto universal es el amor.



Anómalos

26.5.21



Mis palabras solo alcanzan expresar de manera imperfecta la emoción de lo que siento en mi interior.



Contienda

25.5.21



A la miseria humana la derrota la nobleza igualmente humana.




Saciedad

24.5.21



No hay nada tan vacío como un corazón que nunca se llena.




La escalera

23.5.21


Me levanté temprano como cada jornada. Eran las seis de la mañana de un día borroso y gris. Al salir para el trabajo mis aletas nasales respiraban agua y mis pensamientos me hacían aligerar el paso como para desquitarme del reparto de más de cinco toneladas de peso que me esperaba. Al recibir el itinerario de la distribución de gas, allí estaba otra vez la casa de la colina.

Decidí dejarla para el final y, mientras pensaba en los trescientos treinta y tres escalones que la elevaban de la calle, me vino una imagen de la mansión hisckotiana que aparece en ‘Psicosis’, y a su moradora, una vieja señora que jamás me dio propina.

Tras un espeso día aparqué el camión aliviado de tara y con un persistente olor a repollo podrido. Me fijé en la escalinata que serpenteaba hasta la vivienda. Cargué dos botellas de butano sobre mis hastiados hombros. Su resplandor anaranjado era lo único que coloreaba aquel paisaje de ceniza.

Recordé, antes de comenzar a subir, que en el cálculo de escaleras, la profundidad de cada escalón debe de ser de unos treinta centímetros y su altura no superar los veinte, siendo muy recomendable que el alto de paso sea superior a dos metros.

Sin embargo a cada escalón de aquella tortuosa ascensión, en mi cabeza se dibujaba la cara de la propietaria hosca a la que siempre le parecía mal el servicio, por el que siempre se quejaba y que terminaba con una avalancha de improperios.

Mientras avanzaba con la pesada carga trataba de comprender el valor de las huellas y de las contrahuellas para saber cuál sería la elevación o distancia entre peldaños, cuyo diseño el constructor no supo replantear.

Cuando la policía llegó, expliqué cómo había sucedido el accidente, porque la mujer que ahora yacía en el suelo entre un charco de sangre, abrió la puerta justo en el momento que resbalé, por la pátina de lluvia en el piso, y por la mala aplicación de la Ley de Blondel que en su ecuación establece la fórmula correcta para que el usuario pueda desempeñar la tarea de ascender por la escalera.

 


Escala cósmica

22.5.21



Según detalla una definición el ajuste fino es el escenario donde un determinado número de parámetros deben tener una medida exacta para aclarar un acontecimiento advertido. Es un sentido del que carecen gran de individuos frente a los actos de sus semejantes.


Mirada imperecedera

21.5.21



La contemplación de la belleza nos eterniza en el tiempo.




Emanación

20.5.21



Lanzas una idea como quien lanza al cielo un cohete en la noche. Todo se ilumina durante un instante y después otra vez la oscuridad.



Antimétodo

19.5.21



Todo desorden consume un caos.



Memoria reciente

18.5.21



Olvidamos lo reciente porque nos absorbe la rutina.



Anuencias

17.5.21



Eres escritor cuando pierdes el pudor de asesinar a alguien.




Cuento Invisible

16.5.21

Desatención

15.5.21



La desmesura desprecia a lo exquisito.



A la deriva

14.5.21



El ser humano actual es como un mensaje dentro de una botella que nadie lee.



Inexistir

13.5.21


Es tan humano sentir nostalgia por todo cuanto no existe.



Fatalismo

12.5.21


Cuando pensamos en lo peor es porque entendemos que puede suceder, no porque vaya a suceder. Y eso es lo que nos duele y nos hunde.



Determinismos

11.5.21



Todos nacemos poetas: unos se hacen y otros se deshacen.




Fiascos

10.5.21



Para nada me gustaría envejecer y morir enfadado con el mundo porque el mundo no se ajusta a como yo pienso.



Envío postal

9.5.21



Remití una carta cuyo destinatario era yo. Al recibirla sentí que me escribía un extraño. Y la devolví sin leerla.



Audífonos

8.5.21



El silencio del olvido es lo que más se escucha al recordar.




Reversos

7.5.21



Si de ilusión también se vive, ¿se muere de desilusión?



Ovejas muertas

6.5.21



«Sin tradición, el arte es un rebaño de ovejas sin pastor. Sin innovación, es un cadáver», afirmaba Winston Churchill. Tradición e innovación son caras de la misma monedad creativa.




Boutade

5.5.21



Estoy convencido de que para la mayoría de la gente la poesía es una frivolidad, algo que no tiene practicidad alguna. Y, en cambio, la poesía es la que nos hace entender el sentimiento del mundo.



Mandados

4.5.21



Manda a un niño a hacer algo y lo hará mal. Y a pesar de ello, mándalo otra vez o anularás su capacidad de aprender y madurar.



Recorridos

3.5.21



Al comienzo del viaje extrañamos el vagón donde vamos hasta que nos aclimatamos a su espacio. Lo que más nos cuesta es mudar de tren en cada estación. Después no faltan los que se apean en marcha o saltan de un tren a otro con toda facilidad.



El profesor

2.5.21



Entré en el aula y me sentí como el hombre invisible, no porque nadie me viera (que nadie me vio) sino porque mi materialidad era imperceptible a sus percepciones. Durante unos minutos los observé mientras ellos continuaron ignorándome imbuidos en su orgía de ruidos y de estupideces adolescentes. Pensé entonces que debería hacer algo por su más que probables, desgraciadas vidas. Para ello les sonsaqué cuál sería el programa que propondría llevar a cabo en el presente curso. «No hacer nada maestro», manifestaron a coro. «¿Nada?», les pregunté con retintín. Habían trazado su destino y yo le ayudaría a que llegaran a ser nada.



Manantial

1.5.21



Siendo niño la lluvia me hacía sentir vulnerable. Luego, alguien bienintencionado, me decía para restar importancia: «son cuatro gotas; eso no mata a nadie». Creo que de esa incomprensión, de ese anular la sensibilidad es de donde nace la poesía.