Crediticio

11.5.19



Avalar los sentimientos y amortizar los sueños es financiar el corazón.



Pasar el tablón

10.5.19




Aquellos chaparrones de octubre traen a mi memoria vivencias asombrosas de la infancia. Los días que la lluvia anegaba las calles solían colocar un tablón de una parte a otra de la calle y que la gente pudiera cruzar sin mojarse los pies. Al salir de casa llevaba la advertencia de mi madre para que usara, con cuidado, aquel puente improvisado y mantenerme seco para ir al colegio o para volver a casa. 

Pasar por el madero y mantener el equilibrio para no caer suponía un cierto temor en mi mente infantil, porque dudaba si pasar rápido o atravesarlo lentamente con tal de no empaparme, algo que azoraba mi mente inocente de experiencias. 

Aunque la sensación que más me impresionaba era sentir bajos mis pies la ondulación de la manera que vibraba por el peso y trasmitía un temblor a todo mi cuerpo, provocando un momento de vacilación y miedo a ponerme chorreando. Impresión semejante a la que experimentamos en nuestra vida cuando tenemos que cruzar esos momentos que nos llenan de angustia y vértigo. 



Geometrías

9.5.19



La vida es circunferencia y no una línea recta. Retornamos al punto de la nada de donde partimos y, a medida que se va cerrando el círculo, vamos teniendo una visión más completa de la figura que representa.



Hendeduras

8.5.19



El pensador y epicúreo, Polistrato, visitador del jardín de Epicuro, y creador del escrito 'Mantenerse en la Filosofía' encontrado en la Villa de los Papiros de Herculano, anotó: «Sobre la dureza de mi yo me respondo cada día con una dosis de contrición». Las peores ofensas son auto inferidas ya que terminan por agrietarnos.



Valores

7.5.19



¿Cuándo nos vamos a enterar de lo que vale un peine?



Sacudidas

6.5.19



Nunca me he podido sacudir la sensación de que la gente contemple esta inclinación mía a las palabras como una mera inutilidad y un disparate. Pienso que desde una óptica ajena a este mundo debe resultar una delirante pérdida de tiempo.



Totalidad

5.5.19



Soy yo —me dijo—. Ah, entonces eres todo el universo.



Ceremonias

4.5.19



Los ritos sociales, en especial los religiosos, he tratado de interpretarlos más como la repetición de un hecho incuestionable que pasa de generación a generación, que como un verdadero sentimiento y vocación por el hecho reiterado. En la mayoría de los casos se trata de exteriorizar el estatus social entre el círculo de parientes y amistades. Lo he podido comprobar con familiares donde la invitación era ineludible y que, tras el ceremonial, no lo han continuado alejándose de la iglesia con la misma celeridad que se aproximaron. No les reprocho nada porque es su forma de pensar y lo asumen como algo normal. 

Viene contar esto aquí, porque presencié una escena hace unos días ante el requerimiento de una madre para que su hijo de diez años fuera a la catequesis, y mientras el niño se resistía a ello, lo oí decir con total espontaneidad: «me estáis obligando a ser católico».



Métricas

3.5.19



El tiempo de la infancia es lírico. El tiempo poético es niñez. Ninguno de los dos tiempos puede ser cronometrado por el pragmatismo de los relojes.



Tabernario

2.5.19



Mi amigo Julio, catedrático de las barras de bar, me soltó hace unos días una de sus frases lapidarias: «Deberíamos durar noventa años como niños y después morirnos». Y sé que nunca ha leído Peter Pan.



Equivalencias

1.5.19



A veces cuando no nos convence la verdad inventamos una verdad paralela.



Inacabable

30.4.19



¿Si bicho malo nunca muere es porque lo malo no tiene principio ni fin?



Anomalía temporal

29.4.19



Cada mañana, nada más levantar el día, mientras preparaba mis clases de bachillerato observaba desde la ventana a aquella mujer. Barría con paciencia el trozo de acera de su vivienda y luego, con un paño blanco en sus manos, limpiaba con extenuante parsimonia cada tramo del enrejado de su porche, sin detenerse ni hablar con nadie. Su presencia casi enigmática me hacía intuir que dentro de ella habitaba una peculiar concepción de una realidad pudibunda e higiénica, regida por unas normas que rayaban en un trastorno de personalidad y trataba de aislar a sus hijos de la sociedad contagiosa. Las noticias que después me llegaron de esta mujer así lo confirmaron, mientras su imagen cíclica volvía a ejercitarse en la pulcritud de su morada durante décadas. Tras sufrir una crisis de salud fue internada en una residencia para mayores que necesitan atención, donde falleció hace unas semanas. 

Hoy he visto a su hija en el mismo lugar, realizando con idéntica precisión las mismas tareas de su madre. Por un momento he pensado que se estaba produciendo una singularidad en el tiempo.



Fases

28.4.19



Cada vez que un amor la abandonaba su corazón menguaba. Luego, al enamorarse de nuevo, volvía a crecer.



Amos de la nada

27.4.19



El Barón de Teive en ‘La educación del estoico’, advierte: «Tengo todas las condiciones para ser feliz, salvo la felicidad». A veces lo tenemos todo menos lo esencial porque nos han entrenado en la ilusión del deseo, donde solo importa la presencia de lo fugaz. 



Puntos de luz

26.4.19



Hace años escribí que «La soberbia del ser humano es colosal. ¿Cómo va a permitir desvanecerse en la nada que lo vio crecer? En un acto de supervivencia inventó a Dios para que éste le asegurara la eternidad». Hoy leo en un diario que el genetista Ginés Morata, uno de los dos únicos españoles que pertenecen a la Royal Society del Reino Unido y a la Academia Nacional de Ciencias de EE UU, declara: «Dios no nos ha creado a nosotros: los humanos hemos creado a Dios». La solidaridad en el saber ahuyenta bastante la soledad del pensamiento.

Emparedados

25.4.19



En una novela que leía hace unos días, uno de sus personajes se quejaba porque «antes los hijos daban de comer a sus padres. Ahora los padres son comidos por los hijos». Hay generaciones sándwich a las que les toca sufrir las determinaciones del modelo anterior y del modelo que les sucede, y que aparecen como perdedoras ante lo beneficios que deberían haber logrado en su existencia. Recuerdo a mi padre y a muchos de sus amigos contar cómo debieron entregar a sus padres hasta el último salario cobrado mientras estuvieron en el hogar familiar, y cómo después algunos de sus descendientes los llevaron a residencias. El péndulo del azar nos coge a cada uno en un lugar diferente y nos trata desigual.



Espacios

24.4.19



¿Qué existe entre el silencio y la palabra?



Leíbles

23.4.19



No puedo leer sin sentirme libro, ni puedo ser lector sin haberme leído.



Narcóticos

22.4.19



El ilimnógrafo y editor, Plesirroo de Tesalia, manifestó «antes vaya el entusiasmo, inspiración de los poetas, que la euforia que exagera la alegría». En estos tiempos nos venden más lo segundo que lo primero.