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Ofertas

8.1.21



Huyo de las misceláneas. Tengo este blog hecho de palabras —solo palabras— en tiempos donde la imagen es predominante (no recuerdo haber publicado ni una sola de ellas en estos años). Edito otra bitácora de poemas, donde nadie comenta nada, y a la que asisten lectores de ese género. Mantengo varias cuentas en Twitter con microcuentos y aforismos y en Instagram publico imágenes, además de una compilación en Facebook, aquí sí es donde los asiduos aceptan más la mezcolanza de publicaciones por ser un perfil de usuario multimedia. La entrada no está referida a la bondad o malignidad de las redes sociales, sino más a los comportamientos estancos de quienes las siguen y no quieren salir de un contexto especializado en el contenido que se publica. Los usuarios que acuden a beber de una determinada fuente no quieren que les cambien el sabor de la bebida.



Año XV

3.1.20



Esta frágil epopeya un día se quebrará, igual que se rompe un vaso de cristal al estrellarse contra el suelo. Nada debería haber ocurrido y sucedió. Algo de lo que pueda pasar de ahora en adelante acontecerá y mientras se aproxima ese desenlace, el nudo de los días tejerá una urdimbre de historias, verdaderas historias imaginadas, sentidas, observadas, reflexionadas. Pensamientos solitarios llenos del eco de otras voces y de otras palabras. Entradas cargadas de énfasis vital y obstinación. Al final solo es eso, la débil voluntad por aguantar agarrado al salvavidas de lo que se recuerda y la terquedad por anotar una grafía más.



Entregas

10.11.18



Cada noche, cuando este blog se actualiza, lejos de aquí, a unos doce mil kilómetros de distancia, a punto allí de abrirse la mañana, una persona para mí entrañable, lee estas letras. ¡Qué confusión de sentimientos al pensar en este prodigio humano! La noche agrieta su obscura cáscara para dejar salir la luz del día mientras mi día se hunde en el pantanoso sueño. 

Pienso en ella y en su familia y amigos, tan distantes y distintos a mí. Mares de arroz, campos marinos con peces de colores, sonrisas a flor de piel. La extraña lejanía de lo lejos.

En este vertido de palabras, molde de mi pensamiento, me expongo ante vuestros ojos para ser redimido por la lectura.

Es una exhortación del tiempo poseído e ido a la vez, que me complace dar a quien se quiera dar con su generosidad a él.



Imparcialidades

27.10.18



Hace unas semanas una persona me salió al paso mientras caminaba distraído. Suele leer de manera asidua este blog (aunque en su caso lo realiza a través de una red social). Tras reconocer lo sugestivo que le resultaba la lectura de algunos de los aforismos y comentarios, me hizo una sugerencia. «Deberías reflejar la autoría de esas frases», me comentó. Esbocé una media sonrisa y sentí, de repente, una grata alegría al pensar que, desligados de mi persona, los textos eran apreciados sin influencia de amistad o simpatía por quien los escribió. Los juicios desafectos otorgan un plus de consideración a lo creado.



Llamar la atención

19.3.15



Cada día surgen conceptos y definiciones que tratan de explicarnos la realidad que nos contextualiza. Uno de los que ha surgido ligado al desarrollo de Internet es el de la ‘economía de la atención’. En un mundo donde la información crece a diario, el consumo de atención es quien determina su economía, más porque es necesario ese bien tan preciado como es el tiempo. Por eso aprecio tanto el interés demostrado por quienes se acercan a leer este blog.



Década

1.1.15



Hoy he cumplido diez años y me he metido en los once. Si fuera un niño tendría una tarta de cumpleaños y muchos regalos. Si fuera un árbol estaría alto y frondoso. Si fuera un número sería una decena. Si fuera tiempo sería una década. En el sistema binario sería una unidad de información. En una escala del uno al diez sería lo máximo y en la mitología religiosa sería los diez mandamientos. También podría ser un decálogo de principios y finales. Y nada de eso me define.
Sólo soy un simple blog perdido en el inmenso universo estelar de Internet. Una bitácora con un largo nombre absurdo que a pocos les hace reflexionar y que es fácil de olvidar. Soy un lugar tantas veces maltratado por su autor con el que mantengo una relación de amor y de desafecto porque él me creó y el me enterrará. Soy un espacio por donde pasa gente maravillosa cada día a la que admiro y a la que agradezco sus palabras, personas para quien esta es su casa donde hacer posada de ideas. En definitiva, estoy contento porque estoy vivo diez años después.




Blogueros

4.12.14



Hacía tiempo que no me topaba con nadie que hablara desde la emoción de los blogs, —esa nave de locos—, hasta que hace unos días me encontré con Antonio Fernández Ferrer. Antonio es un buen escritor y un buen amigo. Generoso, comprometido e inquieto, ha encontrado, como tantos de nosotros, un refugio y una ventana al mundo desde su blog ‘Entre los sauces’.
En su languidecer las bitácoras digitales y sus autores, ha pasado por un proceso de decantación hasta seleccionar los ejemplares más resistentes y apasionados. 
Y ahí están, sirvan como ejemplo, mis Juan Poz y Joselu, infatigables pilares que amortiguan mis caídas libres y me sirven de estímulo y resistencia, y de cuya altura intelectual y bonhomía hablan sus letras.  Ellos, al igual que otros miles, seguirán en esta aventura de antihéroes anónimos.



La soledad del bloguero de fondo

27.9.12



Hubo una buena época donde surgieron multitud de blogs pero, poco a poco, han ido menguando. Un tiempo animado y divertido de relaciones. Y ahora cuando veo como quedan menos blogueros y crecen las bitácoras detenidas, no sé si se trata de una carrera de resistencia donde cuanto más avanzas más solo te quedas. Principio y final se resumen en soledad.



Residuos

8.9.11




A veces soy como un chatarrero del lenguaje. Hago acopio de adjetivos y adverbios que se me oxidan. Recojo pronombres personales que se humedecen y se me aherrumbran los tiempos del verbo.

Acopio palabras echadas en olvido y otras en desuso, igual que aquellas inservibles de tanto utilizarlas.

Se me enmohecen el sintagma nominal y el complemento directo.

La escritura tiende a ese vicio de convertirse en desperdicio, en escoria de lo ideado y que no ha sido, en sobra del intento malogrado.





15-M El descontento es el primer paso en el progreso de un hombre o una nación »

La escritura perpetua

21.7.11




Frente a otros tipos de escritura, la producción de un blog es incesante y no está cerrada. Tiene un comienzo y no tiene un final determinado. Es una producción abierta, inacabada y revisable. Ninguna Historia de la Literatura la abraza porque no la puede contener. Es posible que radique su grandeza o su miseria, las dos o ninguna, aunque que sí su ilimitada creatividad.





15-M ¿Votarlos o 'botarlos'?»

Ingenio diabólico

14.7.11




Antes de que este blog existiera todos sus lectores estaban fuera del blog. Después de activado su mecanismo lector, están contenidos en su interior y son cómplices de su fabulación, que no es otra que la experiencia lectora.





15-M Indignarse no es suficiente »

Blogs enredados

27.5.11



Los blogs son la mayor plataforma de autoedición de contenidos en manos de los ciudadanos. Su libre acceso los ha popularizado y extendido a todos los ámbitos sociales y profesionales, creándose a diario miles de ellos. Sin embargo, su formato parece ralentizado ante la inmediatez de las redes sociales. Es por ello que hoy los blogs no se conciben sin una relación simbiótica entre unos y otras. O será como apuntan "el nuevo ecosistema informativo en el umbral del caos" de las VIII Blogs y Medios: «Una nueva era dominada por el Homo Sharer».









15-M:«lo hicimos porque no sabíamos que era imposible»



Día del lector de blogs

23.4.11



En un lugar de Internet, cuyo nombre está encriptado por su seguridad, no ha mucho tiempo que navegaba un hidalgo bloguero de los de ratón en ristre, alfombrilla, flexo, cámara web, ordenador portátil y de sobremesa. Conectado a las redes sociales Facebook, Tuenti, YouTube, Twitter, consumía las tres cuartas partes de su tiempo. El resto en foros, podcasting, Blogger, WordPress, weblogs, Wikipedia,...





Comunidad

2.12.10



Cuando comencé la aventura de los blogs pensé que se trataba de un peregrinar en solitario. Pronto comprobé que eso no era así, aunque antes tuve la sensación que horadaba en un espacio lleno de vacíos como era Internet.

Poco a poco alrededor de la bitácora creció una selecta colectividad de amigos y visitadores. Algunos tan fieles que persisten como el mismo blog y que se han hecho imprescindibles en este espacio que pueblan.

En este recorrido no ha faltado quien no encontraba explicación a mis nulos comentarios en sus blogs, incluso hubo quien me lo recriminó, como de igual manera hay quien no ha dejado de visitarlo durante largas temporadas.

Hoy puedo decir que pertenezco a un círculo de amigos no visibles que son palpables es sus palabras, generosos en su participación y estimados en su presencia.



Lecturas ergódicas

23.4.08



Los derechos imprescindibles del lector’, escritos por Daniel Pennac, proclaman, al principio de su articulado, el derecho a no leer, inclusive lo escrito en este o cualquier otro blog. Ahora bien, me reservo el derecho a contar historias –breves cibertextos si se quiere– con el claro propósito de aliviar el estado de ánimo de la realidad.

Familiaridad

27.5.07



Desde que tengo un blog (que raro me suena escuchar esto) algunos amigos, conscientes de mi ‘poder’ suelen decirme, al hilo de alguna anécdota cotidiana: «pon eso en tu blog».

El sueño

17.3.07


Trataba esta noche de buscar un tema que me diera para anotar mi post diario. A duras penas aguantaba despierto después de una larga semana que acumula el cansancio por días. Entre la somnolencia y la desesperanza, decidí apoyar la cabeza sobre la mesa para descansar un momento y cerré los ojos.

Al instante me quedé dormido y comencé a soñar con este blog, con sus títulos y sus palabras. Viajé por los anaqueles de Internet en busca de la anotación del día, visité páginas y leí libros hasta perderme en el Aleph del pensamiento y, al final, encontré una idea feliz.

Cuando desperté de mi sueño el comentario ya estaba escrito.

Amores que matan

12.2.07



Recuerdo, ahora, una de las primeras lectoras fieles a esta bitácora. Regularmente dejaba comentarios casi a diario. Hallé en sus ‘post’ la recompensa necesaria para mi bitácora, entonces, casi huérfana de lecturas.

Un día me comentó que no colocaba el enlace de mi ‘blog’ en el suyo porque no quería compartir con nadie lo que yo escribía. Necesitado como estaba de formar parte de los anillos de amigos ‘blogueros’ que pueblan la red, encontré, en principio, egoísta y ridícula su decisión.

Sin embargo al reflexionar sobre el hecho, me di cuenta que aquello era un acto de amor. Igual que quien se tropieza con un tesoro y lo oculta a la vista de todos para que nadie se lo robe.

El sentimiento, a veces, tiene esa cadencia: ambicionamos sólo para nosotros aquello que queremos. Y es hermoso y brutal al mismo tiempo.

Cómo escribir un blog y ser famoso

22.9.06


Lo vi en una feria del libro entre los saldos y lo debería haber comprado. Ahora no recuerdo ni la editorial ni el nombre del autor quien proclamaba que se trataba de un manual de autoayuda para esa nueva “casta social” que se denominan blogueros.

De lo que pude leer en su contraportada recuerdo, más o menos, que venía a decir que una buena carga de morbo no lo vendría mal a una bitácora.

En Cómo escribir un blog y ser famoso se recomendaba colocar muchos vídeos de YouTube; agregar etiquetas con palabras como wiki, friki, weblog, blog; algunas chorradas simpáticas rebuscadas en el ciberespacio y copiar, pegar y recortar cuantos contenidos se vieran interesantes en otros blogs mencionando o no su autoría.

En caso de no obtener una rentabilidad inmediata con estas estrategias, el autor aleccionaba cómo criticar, abiertamente, a las bitácoras más famosas, si antes no se había podido conseguir la amistad o el padrinazgo de alguna de ellas. Otra salida era organizar una romería de comentarios por la blogosfera.

Sí recomendaba el autor como imperativo tratar de utilizar los grandes medios de comunicación generalistas: prensa, radio, televisión como plataforma publicitaria. Para lograrlo buscar contactos dentro de ellos, hacer amigos, hacer la pelotea.

Tampoco hay que espantarse, es lo que también ocurre en la realidad no virtual.

El inspector de blogs

19.3.06




La pasada semana mientras intentaba colocar un comentario en la bitácora recibí la visita de un extraño personaje:

― Buenos días.
― Buenos tenga usted. ¿Qué desea?
― ¿Es usted el dueño de esta bitácora?
― Bueno, tanto como el dueño…
― ¿Es usted Francisco M. Ortega Palomares?
― Hasta la presente sí.
― Pertenezco al Ministerio de Tecnología y Ciencia. Al cuerpo de inspectores de nuevas tecnologías. Sección bitácoras.
― Usted dirá.
― Voy a hacerle una inspección de la bitácora.
― ¿Es obligatorio?
― Obligatorio y necesario. Va siendo hora de poner orden a todo este desbarajuste que se traen ustedes entre manos.
― Oiga que yo actúo por mi cuenta.
― Eso es lo que dicen todos pero hemos descubierto que existen nexos entre algunos ‘bitacoristas’.
― ¿Y tiene que empezar por mí?
― Está usted en la lista de los más sospechosos.
― ¿Sospechoso de qué?
― Es usted un ‘bloguero’ de dudosa presencia en el ciberespacio. Se le acusa de cargos como:
No escribir textos objetivos
Hablar de cuestiones personales
Adjetivar las oraciones
Repetir más de 30 veces la palabra ‘corazón’ en el último año
Hacer críticas intempestivas al orden establecido
Abusar compulsivamente de la imaginación
Tener déficit de contenidos científicos
Falta de vínculos a otros ‘blogs’ prestigiosos
Escasez de referencias al mundo de las bitácoras
No criticar otros ‘blogs’
No ser un ‘geek’
― ¿Me va a multar?
― No, le vamos a suspender de bitácora y sueldo un mes. Si no cambia de actitud nos veremos obligados a quitarle el carné de ‘bloguero’.
― Me está usted asustando. ¿Se puede presentar una reclamación?
― No, porque no existe ni la Oficina de Reclamaciones de Bitácoras ni el Defensor del ‘Bloguero’.
― Entonces estoy perdido.
― Lo está.