Frente a otros tipos de escritura, la producción de un blog es incesante y no está cerrada. Tiene un comienzo y no tiene un final determinado. Es una producción abierta, inacabada y revisable. Ninguna Historia de la Literatura la abraza porque no la puede contener. Es posible que radique su grandeza o su miseria, las dos o ninguna, aunque que sí su ilimitada creatividad.
15-M:« ¿Votarlos o 'botarlos'?»