El pretendiente

18.6.23



Cada atardecer el parque de La Lealtad se poblaba de mujeres solteras que paseaban sus perros. Enamorado, las miraba con el frustrado deseo de convertirme en can.




Infatigables

17.6.23



Escribir es siempre una tarea inacaba.




Insustancialidades

16.6.23



Cuando el tiempo es anodino hay que crear espacios de imaginación y resistencia.




Subjetivaciones

15.6.23



Hasta mis pensamientos más categóricos son relativos.




Menudencias

14.6.23



Y luego está esa gente que, a las cosas sin importancia, les da demasiada importancia.




Sutiles

13.6.23



Cada tiempo que termina está encerrado en una burbuja de la memoria que desvanece el olvido.




Murmuraciones

12.6.23



No deberías hablar demasiado bien de ti mismo, podrían llegar a creerte.




Invisibilidad

11.6.23



Los niños jugaban en la pista deportiva. Se jaleaban e insultaban con ímpetu mientras corrían y se empujaban por todo el terreno de juego. Entusiasmados en la disputa futbolera ninguno se percató que había desaparecido el balón.




Sigilosos

10.6.23



Antes de dormir es necesario pararse a escuchar el silencioso sonido de las sombras.




Atrasados

9.6.23



Caminando rápido se llega después.




Lapso

8.6.23



Al detenerme veo cómo de rápida pasa la vida de la gente.





Concentrados

7.6.23



Leer es escuchar atentamente el pensamiento.




Desiguales

6.6.23



Las identidades no nos hacen mejores o peores, nos hacen diferentes.




Inapreciables

5.6.23



Cada gesto, cada mirada, cada palabra, nos revela ante los demás tantas veces invidentes.




Helena abandona el grupo

4.6.23



En el WhatsApp se podía leer el mensaje sucinto: Helena abandona el grupo.

—¿Por qué se ha ido Helena? —preguntó Héctor.

—No lo sé, pero seguro que le habéis dicho algo malintencionado, porque os conozco —escribió Penélope.

—Bueno ya sabéis lo voluble que es Helena. No le daría mayor importancia, mañana pedirá que la volvamos a meter —medió Paris.

—Lo último que apuntó es que estaba amurallada en este grupo —recordó Penélope.

—¿Amurallada? ¿Eso qué es? — interpeló Briseida.

—Pues que se siente atrapada, incomprendida, juzgada, lo de siempre —respondió Ifigenia.

—No seas así. Helena tiene sus problemas y a veces necesita desahogarse —intentó suavizar Menelao.

—Pues que se desahogue con un psicólogo, no con nosotros. Que ya estamos hartos de sus dramas y sus quejas —replicó Ulises.

—Bueno, no os peleéis por esto. Lo mejor será que alguien hable con Helena y le pregunte qué le pasa. ¿Alguien se ofrece? —propuso Tetis.

—Yo no, desde luego. Ya tuve bastante la última vez que intenté consolarla y me soltó una sarta de reproches —dijo Eudoro.

—Ni yo. No tengo ni idea de cómo tratar con ella. Siempre se enfada por cualquier cosa —añadió Criseida.

—Vale, pues me toca a mí. A ver si consigo que me explique qué le ha molestado tanto como para dejar el grupo —se ofreció Casandra.

—Suerte con eso. Ya nos contarás qué te dice —deseó Glauco.

—Y no te dejes manipular por sus lágrimas de cocodrilo —advirtió Hécuba.

—¿Cómo os pasáis con la pobre Helena? —sentenció Briseida.

—Esto va a terminar peor que la guerra de Troya —se mofó Aquiles.

Infrecuentes

3.6.23



Lo anómalo será lo auténtico frente a inteligencia artificial.



Descontados

2.6.23



Somos lo que queda de nosotros.





Tumefacción

1.6.23



La inflamación del ego es de lo peor de los padecimientos modernos.




Protecciones

31.5.23



La ficción es una forma de defensa contra la realidad.




Improductivos

30.5.23



Lo extraño es que el mundo se mueva por dinero, trabajo, poder, pero que cuando eso se rompe las personas necesiten ternura, música, poesía.