Relaciones

15.4.07




El moralista galo François Marie de L'Ortie señalaba que «cuando el amor se vive como algo perecedero la relación se hace autodestructiva». En cambio cuando se piensa de manera definitiva se hace autocondescendiente. La destrucción da la oportunidad de reconstruir el mundo, la indulgencia, en cambio, garantiza la pasividad. Sea como sea no estamos salvados.



8 apostillas:

Anónimo dijo...

La indulgencia lleva a la pasividad, pero si se abusa de esta puede llevar, muy de a poco, a la destruccion (o al menos pienso yo).

Estoy de acuerdo con lo dicho en el primer parrafo.

Nos Leemos che! Saludos

Veva dijo...

terrible, demoler o deconstruir. Todavía creo que puede ser algo asi como pasar la vida juntos

Cervecerix dijo...

Ni nunca lo estaremos. La meta de la vida es mejorar; y solo hay una forma de mejorar algo: destruyéndolo y reconstruyéndolo una y otra vez.

Adise dijo...

Como alguien me dijo no hace mucho, "estamos para perdernos", y ahora añado yo que de muchas maneras y por muchos motivos.

No, no estamos salvados.

Un beso.

Anónimo dijo...

Estamos perdidos, si. ¿Pero quien dijo que deberíamos salvarnos?

Parece ir contra toda evidencia.

Aunque es una bella ilusión con la vale la pena reconciliarse todos los días

Jonás dijo...

En todo caso, la vida lleva anejada una alta dosis de incertidumbre. Cuando creemos poseer algo, nunca estamos tan cerca de poder perderlo. El amor y la amistad son extremadamente frágiles.

Anónimo dijo...

No, no estamos salvados, pero esa es la única forma de vivir la vida al límite y saborearla hasta el final.

Besos bárbaros

P.D.: Francisco, cada vez que te leo me destruyes y vuelvo a renacer ;-)

simalme dijo...

Sí, sí hay salvación, la duda. Que, además, creo que es lo más común.