El filósofo Vladimir Jankélévitch, autor de El no-sé-qué y El casi nada (1957 y 1980), que centra su pensamiento en torno al instante, defendió que el tiempo era como una esponja, en una de las teorías más peculiares descritas que haya oído. Sostuvo que el mismo estaba conformado por una estructura de agujeros de antimateria capaz de absorber gran parte de energía la cual, al ser concentrada, desaparecía. Y que el tiempo, infragmentado, era un continuum, por lo que para él relojes y calendarios distorsionaban la naturaleza temporal y nos hacían perder su verdadera esencia y nuestro sentido existencial.
Espíritu del tiempo
30.1.09
El filósofo Vladimir Jankélévitch, autor de El no-sé-qué y El casi nada (1957 y 1980), que centra su pensamiento en torno al instante, defendió que el tiempo era como una esponja, en una de las teorías más peculiares descritas que haya oído. Sostuvo que el mismo estaba conformado por una estructura de agujeros de antimateria capaz de absorber gran parte de energía la cual, al ser concentrada, desaparecía. Y que el tiempo, infragmentado, era un continuum, por lo que para él relojes y calendarios distorsionaban la naturaleza temporal y nos hacían perder su verdadera esencia y nuestro sentido existencial.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
6 apostillas:
¡Cuántos sabios, pensadores o creadores hay que son totalmente desconocidos! Ignoraba todo respecto a este filósofo cuya reflexión sobre el tiempo, al menos, es digna de ser considerada. Ojalá pudiéramos desechar los relojes y calendarios y no estar esclavizados por ellos.
E incluso se cuentan en las culturas mas ancestrales que somos capaces de parar nuestro propio tiempo....
Si lo consigo os lo hago saber a todos, si todos somos capaces de hacer una paradita al mismo tiempo en nuestro tiempo nos van a sobrar PC (portatiles o no)... os imaginais.
Saludos.
Nada más leer la teoría he pensado en Bergson. Después, porque creí que la existencia del filósofo citado se trataba de una invención de nuestro anfitrión, he ido a confirmar que existiera el tal Jankélévitch. Y ahí es donde he visto confirmada la relación maestro-discípulo que ha de establecerse entre ambos. En cualquier caso, mi idea es la de que hay que olvidarse del tiempo. Sí, es eso que, fragmentado, estamos obligados a respetar para la marcha a trompicones de buena parte de nuestras vidas; pero incluso en esas parcelas conviene olvidarse de él, no pensar en él, y menos aún sobrecogernos por la constatación de su paso. Sí, la felicidad es la suspensión del tiempo. Los relojes son los testigos absurdos del tempocidio inevitable.
un tal joaquin una vez canto: el tiempo es una mentira que han inventado los viejos.
Para mas informacion sobre las mentiras del tiempo se puede leer la novela: Los Desposeidos de Ursula K. Leguin, no es el tema central pero tb es tokado.
Mmmmm su filosofia de ver la vida del espiritu del tiempo de Vladimir ankélévitch....fue como su existencia en este mundo , de acuerdo a los calendarios solo vivio 23 años,increible pero su espiritu quedo en la eternidad
Publicar un comentario