La raspa

14.3.07


Mi tío Antonio era un niño cuando aborreció el pescado. Una raspa de jurel estuvo a punto de costarle la vida. Lo pasó tan mal que nunca más volvió a comer pescado porque decía recordar la raspa clavada en su garganta y aquella sensación de ahogo.

Con la ausencia de los seres queridos pasa igual. Nos vuelven sus imágenes y, entonces, acude a nuestra garganta esa tristeza que duele como una raspa atravesada.

9 apostillas:

Anónimo dijo...

Quién sabe por qué la ausencia duele en la garganta, y no el pie o el ... culo.


Besito.

Anónimo dijo...

Muy cierto. Buen día.

Anónimo dijo...

Tienes toda la razón. Se podría decir con otras palabras pero querría decir lo mismo.
Un saludo :)

mali dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
mali dijo...

Qué cierto, esa sensación de ahogo...

Yo también aborrecí el pescado, bueno..., el pescado, el marisco, cabezas de animalillos,.... no como nada que tenga ojos cuando está en el plato, :s
no puedo evitarlo, lo cierto es que empecé a hacerlo, cuando se me ocurrió que en los ojos reside el "alma" o "esencia" de los seres....queridos o no...

un abrazo

Tocotó dijo...

Supongo que la sensación de tristeza y ahogo, se acaba tornando nostalgia e incluso una sonrisa con el paso de los años...

exLyda dijo...

Quizás el nudo viene por las ganas de gritar nuestro abandono y lo inútil que resulta. De nada sirve decirles que los queremos, demasiado tarde.

Ah, y yo le tengo fobia al pescado.

Cervecerix dijo...

Estoy de acuerdo en que esas imagenes vuelven y la mayoría de veces son dolorasas, pero pienso que a pesar de todo es una tristeza dulce (triste consuelo, lo sé). Mucho más allá de una raspa atravesada...

Un beso dijo...

Depende de la persona duele en un sitio diferente. A mi me duele el estomago (será porque todo lo asocio con un sabor). A otros le duelen los ojos (porque su vida pasa ante ellos en forma de imagenes). A ti te duele la garganta (porque estas lleno de palabras)
Un besazo