Quiasmo lírico

No es igual la poesía maldita que maldita sea la poesía.

Paulino

Lo recuerdo, desde mi estatura infantil, detrás del mostrador de aquella tienda de confecciones y tejidos mientras medía las telas a las señoras que iban a comprar. Es un ser que pertenece a ese libro llamado 'Historia anónima del mundo y quienes lo poblaron'. Le desgraciaron su vida a los cincuenta cuando le mandaron al paro con una indemnización mínima por cerca de cuarenta años de trabajo. El resto lo ha hecho la genética. Aquel hombre, este de ahora, dice que lo poco que es ya, es decir, una buena memoria con la que recordar todo y poco más, se lo debe a la lectura. Y yo no puedo hacer otra cosa que llorar estas letras.

1080 HD

Una mujer teje paciente un hilo de preocupaciones cotidianas a la espera de la llegada del autobús urbano. Junto a ella un hombre duerme, a pierna suelta, en un banco. Más allá un barrendero, mientras recoge restos de suciedad, tosé con gravedad. Numerosos transeúntes pasan junto a la escena de forma inadvertida. La realidad como no es emitida en alta definición no causa embeleso.

Acabamiento

¿El agotamiento de la escritura es el final de la escritura?

Eterna juventud

—Cada vez más pronto los niños dejan de ser niños y se incorporan a ese gran oasis de bienestar.

—Sí cada vez más tarde se emancipan. Sí cada vez son más los operados, liftingneados y barnizados. No cabe duda estamos a un paso de la eternidad.

—La culpa la tiene los padres que ha crecido con lo que llamo síndrome de los hijos de Peter Pan.

—Y eso qué es.

—Es una actitud de quien se niega a aceptar su responsabilidad. Bajo el disimulo social del yo, estos sujetos han terminado por tener hijos. Esos niños, ahora educados bajo el síndrome de sus progenitores —incapaces de entender la renuncia que supone su apuesta de procreación—, crecen en nuestra sociedad bajo la inmadurez de sus padres.

Desidia

Sexto Empírico dictaminó que el camino más corto para llegar a la indiferencia es el escepticismo. Y, sin embargo, en una sociedad desconfiada lo que crece es la indolencia.

Epidemia

Era un ser tan aprehensivo que tras conocer, por las noticias, la propagación del virus de la gripe porcina, no admitió más comentarios en su blog que provinieran de México.

Ensimismados

Visito a una vieja amiga. Consumimos gran parte de la tarde en conversar sobre cosas intrascendentes. Reímos y recordamos. Ni mencionar su enfermedad terminal que, en poco tiempo, me dejará sin su amistad. Cuando me marcho hay dos detalles que me viene a la cabeza: la tenue luz que nos iluminó durante todo el rato y la música clásica que oímos como fondo sonoro. Entonces pienso que es en las despedidas donde más necesitamos del arrobamiento.

Lafargue

‘El derecho a la pereza’ es una predicción realizada en 1880 sobre el sistema económico capitalista, a cuyo desarrollo le atribuye una crisis de superproducción, causa de paro y miseria entre la clase trabajadora. El metaconsumo, camufaldo de especulación, tan responsable de la actual crisis, es lo más parecido al diagnóstico que hizo el francés Paul Lafargue, quien hoy, más que nunca, reivindicaría que «se obligue a no trabajar más de tres horas diarias, holgazaneando y gozando el resto del día y de la noche».

Enjambre

La colmena ha crecido; sus panales ocupan una inmensa red virtual. La paradoja es que las abejas cibernéticas fabrican información para la soledad.

Finitud

¿Cuál será la última palabra pronunciada?

Náufragos

—Mi fracaso está en haber triunfado en la vida —dijo el primer hablante.

—En cambio yo he dogmatizado mi fracaso y me veo como ganador de causas perdidas —habló el segundo interlocutor.

—Verdaderamente quien perdí fui yo que ni alcancé gloria de perder ni obtuve el triunfo de la derrota —argumentó la tercera persona.

Impostura

«El fraccionamiento de las relaciones pone en tela de juicio la sinceridad de cualquier compromiso», defiende Kenneth J. Gergen.

No es de extrañar: roto el Yo en mil pedazos, es la insinceridad quien permanece en el falsario cotidiano de las relaciones.

Hiperhidrosis narrativa

Lo escribía todo al pie de la letra y, en consecuencia, los suyos eran unos textos muy sudados.

Novicio

Me he indultado: ahora puedo escribir con indulgencia.

Auger

Nunca olvidaré la emoción con la que aquel hombre me vendió mi primer ‘Diccionario español de sinónimos, equivalencias e ideas afines’. Su casi reverencia al ver a un joven entrar en su pequeña librería y pedir aquella herramienta me comprometió a usar aquel libro de manera exhaustiva. Hay gestos que aleccionan para toda la vida.

Obras huérfanas

Los nuevos hábitos de lectura en la red han cambiado los parámetros que enmarcaban al ‘lector clásico’. La digitalización de miles de obras ha conformado, en parte, la vislumbrada biblioteca universal borgiana. En derredor a las nuevas prácticas confluye una guerra de intereses como la que mantiene Google, no por las obras sobre las que existe un negocio editorial sino por aquellas otras huérfanas de autor, abandonadas a su suerte y que los lectores deberían reclamar como derechos propios.

Los libros relativos

¿Qué es más importante la lectura o el libro? Dicen que mañana es el Día del Libro pero a qué libro se refieren ¿al no-libro virtual descuartizado en mil lecturas y descompuesto en Internet?

En la caseta de feria

—Hay otras formas de leer que no son la ortodoxa.

—No me negarás el encanto de pasar las páginas de un libro.

—El lector tiene que ir más allá del puro trámite de leer las palabras. Tiene que ser capaz de hacer una lectura inteligente e intuitiva de los textos.

—Aún así la escritura precisa de sus rituales a los que no escapa las editoriales, autores y lectores.

—A tanta celebración e interés por vender libros, le sobra el papel preponderante y mediático de los escritores, abonados al club de la fama y del chalaneo.

La escritura volátil

«La escritura ya no está en la página porque ya no hay páginas», observa José Luis Castillejo en ‘La escritura no escrita’. Lo escrito se ha volatilizado a otros lugares como letra no impresa.