El espejismo del deseo
30.10.25
Los seres humanos pasan media vida anhelantes y la otra media desencantados por no conseguir sus deseos. Quizá el error no está en el deseo mismo, sino en el modo en el modo de imaginarlo como una promesa de plenitud, cuando en realidad es apenas una chispa que nos mantiene en movimiento. Deseamos con la ingenuidad de quien cree que alcanzar algo equivale a entenderlo, y al tenerlo, descubrimos que nada se colma del todo. Así vivimos, alternando entre la esperanza y la desilusión, sin advertir que lo más vivo ocurre en el tránsito, en la tensión entre lo que falta y lo que se tiene. Tal vez la sabiduría consista en reconciliarse con el deseo como un estado permanente, no como una carencia, sino como una forma de estar en el mundo, atentos, abiertos, incompletos, pero conscientes de que el anhelo también es una manera de existir.
Etiquetas: análisis, comentario, deseo, reflexión
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1 apostillas:
Cierto: el error no está en el deseo mismo, sino en "el modo en el modo" de imaginarlo
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