Violencia verbal

4.4.10



El gerundio ofuscado me quiso golpear con su terminación. En ese momento imploré a Valle Inclán y concluí el cuento.



4 apostillas:

Kim Basinguer dijo...

Estando leyendo tu post me he encotrado que me falta una explicación mas amplia.

Anónimo dijo...

Está la anécdota, no sé si cierta, sobre Ramón María del Valle Inclán, quien dijo: «¡no, por Dios, él no, que me va a pegar los gerundios!», después que necesitara una transfusión urgente tras sufrir un accidente, y que gritó al ver como un poeta que escribía con muchos gerundios se ofrecía a donar su sangre.

Maria Coca dijo...

Pues menos mal!!!!! Te felicito por ese final a tiempo.

franco dijo...

Estoy atacando al Unamuno de La tía Tula y Del sentimiento trágico de la vida... ¿qué podría agarrar de Valle Inclán cuando termine esto? (Lo de la anécdota con los gerundios suena totalmente genial)