Ampara en una de sus máximas el filósofo galo François Marie de L'Ortie que «sostenemos la verdad bajo la sospecha de nuestras mentiras. Sólo un insensato declara sus verdaderas premisas». Abunda otro escritor y pensador francés, Jean Lucien Arréat, que «a menudo, entre nuestros motivos para actuar hay uno más poderoso que los demás: es el que no se dice».
Ante tal panorama parece que nuestra realidad queda al descubierto. Todo lo contrario de lo que revelan estos autores.