Ángel González

12.1.08



Hoy ha muerto un poeta y me ha cogido en pijama. El desayuno con la muerte ha sido corto y he corrido a refugiarme en la biblioteca. La muerte siempre nos engaña con sus malas artes.


Muerte en el olvido

Yo sé que existo
porque tú me imaginas.
Soy alto porque tú me crees
alto, y limpio porque tú me miras
con buenos ojos,
con mirada limpia.
Tu pensamiento me hace
inteligente, y en tu sencilla
ternura, yo soy también sencillo
y bondadoso.
Pero si tú me olvidas
quedaré muerto sin que nadie
lo sepa. Verán viva
mi carne, pero será otro hombre
-oscuro, torpe, malo- el que la habita…

de Ángel González


12 apostillas:

Symp dijo...

CUANDO MUERE UN POETA

Cuando muere un poeta,
no pasa nada...
Machado murió de pena
echando llanto por la almohada.
Hernández murió de rayo
echando sangre por la boca.
Echando sangre por las sienes
murió Lorca.
¡No queremos que mueran más poetas
echando tristeza por la boca!


Gloria Fuertes (esperando a Ángel González para charlar y pasear juntos...)

BLQ dijo...

no queremos que muera nadie, pero la muerte es un paso más de la vida, el último. Por lo tanto se tiene tomar como normal y alegrarnos de haber compartido algo con la persona que ha muerto.

Gloria Fuerte existió y vivió plenamente, creo, pues no la conocía. Aunque al final no hubiera mucha gente en su entierro, que más da, ella fue genial.

Anónimo dijo...

Este poema lo tenia en la pared de su aula una pt del instituto dond hice las ultimas practicas ^^

Joselu dijo...

Ángel González es posiblemente el poeta con que más me he identificado. Me escapaba en Galicia durante los veranos una o dos horas para leer sus poemas en un bar, El torreón, donde pasaba el tiempo embebido en su poesía. ¡Qué lástima que su voz, porque eso es lo que es un poeta: una voz, se haya apagado para siempre! Por Ángel, nuestro amigo.

Unknown dijo...

Él no morirá, siempre habrá alguien, como tú, que lo haga revivir a través de sus letras...

franco dijo...

Pienso que en este momento
tal vez nadie en el universo piensa en mí,
que sólo yo me pienso,
y si ahora muriese,
nadie, ni yo, me pensaría.

Y aquí empieza el abismo,
como cuando me duermo.
Soy mi propio sostén y me lo quito.
Contribuyo a tapizar de ausencia todo.

Tal vez sea por esto
que pensar en un hombre
se parece a salvarlo.

De Roberto Juarroz en su Poesía Vertical

restará pensar en el poeta, así no dejan de pensarlo. me gustaría conocerle sus poesías, pero, en general, la empatía con los poetas de alguna manera se siente.

franco dijo...

"Yo te sostengo asida por los pétalos,
como te muevas te arrancaré el aroma."

Lindos versos googleados de este Ángel González.

Pilar M Clares dijo...

Qué placer encontrar a Ángel González aquí, con sus palabras: "Aquí está permitido fijar carteles", no sabes lo que me gusta la idea y este poeta. Tu blog, lleno de pensamientos sugerentes, mucho.
Saludos

Maria Coca dijo...

La muerte siempre nos pilla con la ropa menos adecuada. Se ha marchado un gran poeta. Tendremos que cuidar de sus versos...

Anónimo dijo...

Te he cogido la introducción para un trozo de un post de mierda en mi flog. Espero que no te importe.

Me encanta como escribes.

Javi. dijo...

los hombres pueden morir
pero la poesia es inmortal

http://javizgz.blogspot.com/

Rocío Mendoza dijo...

El olvido podría ser la peor muerte, sinónimo de ella. Pero es difícil pasar por la existencia sin dejar marca alguna en nadie. Todos somos etenernos así.