Primeras lecturas

23.4.10



No sé en qué momento exacto de mi infancia fui capaz de leer más allá de un palabra. Sí recuerdo el parvulario, los bancos de madera, el uniforme blanco y un propósito: desentrañar aquellos signos que prometían tanto. Derrida afirma que «hay un momento en que leer consiste en experimentar que el sentido no es accesible». Debí intuir algo de ello y desde entonces hasta ahora permanezco en la resistencia de desentrañar los textos.


3 apostillas:

Joselu dijo...

El momento en que uno aprende a leer, y la mecánica le lleva a entender lo que está escrito, es mágico. En mi recuerdo se superponen dos momentos: ese en el que fui más allá de las palabras y el instante en que me di cuenta de que la imagen del espejo era yo. Desde entonces anhelo volver a ese despertar, a ese momento anterior a que se hiciera la luz. Por otro lado, la deconstrucción de Derrida me resulta bastante abstrusa y poco interesante, aunque en el arte y en el cine ha tenido momentos magníficos. Pienso que Fellini, director que estoy revisando estos días, tiene mucho de deconstrucción en su planteamiento cinematográfico, pero como filosofía me siento alejado de ella. Me quedo con otro paisano argelino de Derrida, con Camus. Lo que dice me interesa y mucho.

Juan Poz dijo...

Tomando como inspiración esa frase de Derrida, yo me permitiría hablar de que el sentido acaba siendo muy insatisfactorio, aunque en su caso y en el de otros deconstruccionistas famosos, también inaccesible. Sumadas ambas cosas desembocamos en la incomunicación.

Míkel F. Deltoya dijo...

Dificil postura pues, el deconstruccionalismo, aunque de manera no directa, busca en caminos un tanto distintos encontrar la razón sobre las cosas.
¿que puede ser de nosotros entonces, cuando nadie nos nombra?

Saludos