Llamadas

29.12.09



Cogió el móvil y marcó un número. Mientras un café humeante la esperaba.

—Hola, he aprobado.


—Sí, estoy muy contenta.


—Gracias, adiós.


—Adiós.

Puso el teléfono sobre la mesa. Hizo una pausa de unos segundos y volvió a marcar.

—Hola, he aprobado.


—Sí, estoy muy contenta.


—Gracias, adiós.


—Adiós.

Tomó un sorbo de café. Los ojos le brillaron. Marcó otra vez.

—Hola, he aprobado.


—Sí, estoy muy contenta.


—Gracias, adiós.


—Adiós.

Apuró su desayuno y miró para saber que nadie la observaba. Llamó de nuevo.

—Hola, he aprobado.


—Sí, estoy muy contenta.


—Gracias, adiós.


—Adiós.

2 apostillas:

Juan Navarro dijo...

¿La vida en un bucle del tiempo? ¿Y nos pasamos la vida tratando de romper el bucle como la crisálida cuando madura y se convierte mariposa?

Anónimo dijo...

La vida es tóxica... y puede que más cosas.