Otredad

23.3.10



—¿Ponerse en el lugar de otro significa dejar de ocupar el propio?
—Nadie se pone el lugar de otro. Para ello es necesario ocupar su espacio, algo que conlleva abandonar el nuestro —le respondió.
—¿Cómo ponerse el lugar de otro yo, salir de nuestra armadura para ocupar otra ajena, vernos a nosotros como extraños de nosotros mismos? —insistió.
—Cómo me pongo en el lugar de quien consigue sin esfuerzo una meta porque utiliza sus influencias. O en el lugar de quien usa la violencia o de quien es indigno con los demás.
—¿No es posible por tanto la empatía?
—No sé, no siempre, sólo en algunos casos. Vete a saber.



8 apostillas:

Javier dijo...

Ser eso que llaman empático es harto difícil. Quienes somos demasiado débiles carecemos de esa habilidad. Por eso, cuando el otro sufre, yo no me pongo en su lugar, yo "soy" el otro.

Un abrazo.

Joselu dijo...

Lo cierto es que hay personas que tienden a la empatía y otras a las que les resulta más difícil. Hay circunstancias en que ésta es harto necesaria. Sentir el sufrimiento de otro es bueno, pero sin dejarnos arrastrar por él. Hay que comprender, pero sin dejar de ser exigente con uno mismo y con el otro. Es un difícil equilibrio ese de ser empático y a la vez requeriente.

María dijo...

Es verdad que lo de la empatía a veces, es muy complicado, pero creo que es imprescindible el esfuerzo, para que la convivencia sea posible.

Sólo así se comprende y se disculpa el dolor y los errores de los demás, única forma de hacer que nos sientan cercanos en ese momento y que de verdad perdonamos.

Con los horrores, sólo hay que sentir empatía para encontrar la forma de llegar al que los causa y convencerle de que los evite y cese de causarlos en el futuro, únicamente para y por eso.


Muchos besos y feliz día.

Patricia Bernal dijo...

Que dificil puede ser en ocaciones ponernos en el lugar del otro, quizá de manera no consciente por que somos egoistas y nos cuesta dejar de pensar en nosotros mismos, pero que gratificante resulta cuando de verdad abrimos este canal de comunicación, no solo para el bien de aquel al que escuchamos, sino para nosotros mismos, por el aprendisaje que esto implica para nuestras mejoras diarias como seres humanos.

Juan Poz dijo...

No creo que la otredad sea equivalente a "ponerse en el lugar del otro", algo que define la empatía, sino el descubrimiento de otro, no del otro, en nosotros mismos. Cuando la otredad se padece de forma radical estamos, como en mi caso, muy cerca de la enajenación.

YoMisma dijo...

La empatía es ser capaz de sentir lo que otro siente, y realmente es un reflejo de algo que sentimos nuestro en el pasado, recordado y revivido cuando nuestro interlocutor nos cuenta sus experiencias.

No se puede sentir algo como propio si nunca antes lo has sentido.

Saludines,
YoMisma

Erne dijo...

Según he oído las mujeres tienen más facilidad que los hombres.

Una vez mi psicóloga me dijo." No puedes ayudarla ( no digo a quien ) porque la empatía que sientes es demasiado fuerte. Yo como psicologa no podría ayudar a nadie si me pasara lo mismo."

Eso me dijo, no sé si será o no así. Cada día creo menos en la psicología terapéutica.

Salud.

Ana Vázquez dijo...

Siempre he sido muy mala en cuanto a empatía, creo que no podría estar en la piel de alguien que ha hecho muy grave, también creo que a veces ya tenemos bastante con estar en la nuestra.

Me alegro de pasarme por aquí otra vez!

Un besito!