—Yo no nací ayer.
Diálogo mudo
9.2.10
—Yo no nací ayer.
—
—Ni me he criado en un verano.
—
—Tampoco estoy dispuesto a comulgar con ruedas de molino.
—
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Escribimos para no dejar de ser quienes somos.
G. Deleuze:
«Quizá soy transparente y ya estoy solo sin saberlo...»
Thomas Szasz:
«Si tú hablas a Dios, estás rezando; si Dios te habla a ti, tienes esquizofrenia. Si los muertos te hablan, eres un espiritista; si tú hablas a los muertos, eres un esquizofrénico»
Marco Aurelio:
«Toma sin orgullo, abandona sin esfuerzo»
Albert Camus:
«La gente nunca está convencida de tus razones, de tu sinceridad, de tu seriedad o tus sufrimientos, salvo sí te mueres»
Charles Caleb Colton:
«Hasta que hayas muerto no esperes alabanzas limpias de envidia»
León Tolstoi:
«A un gran corazón, ninguna ingratitud lo cierra, ninguna indiferencia lo cansa»
Voltaire:
«La duda no es un estado demasiado agradable pero la certeza es un estado ridículo»
Mahmoud Al-Tahawi:
«La perfección es el pecado de los vanidosos. La torpeza la virtud de los indefensos»
Fénelon:
«Huye de los elogios, pero trata de merecerlos»
Antón Chéjov:
«Las obras de arte se dividen en dos categorías: las que me gustan y las que no me gustan. No conozco ningún otro criterio»
Bukowski:
«Que no te engañen, chico. La vida empieza a los sesenta»
5 apostillas:
Yo, tampoco Francisco, tampoco nací ayer...
Sin embargo, ni te cuento la de "ruedas de molino" con las que he tenido que comulgar...
La indigestión, se pasa luego a solas.
Si no mueres en el intento, claro.
Muchos besos.
Creo que como súbditos políticos hemos de tragar ruedas de molino continuamente y poco podemos hacer al respecto. Es como las lentejas: si las quieres las comes, y si no, las dejas.
Las obviedades siempre impiden el diálogo, porque lo impiden con su contundencia de rueda de molino.
Declaración de principios, claro, aunque no siempre lo que se declara es obvio.
"¿Cómo va a hablar? Tiene un pajarillo en la boca", apostilló un tercero.
"O tres galletas", apostilló uno que apareció de repente.
Publicar un comentario