Ah, casi lo olvidaba: los dependientes de aquel gran almacén me enseñaron el doble fondo del vestuario de señoras.
Aprendiz
4.12.06
Fue mi primer oficio, todavía niño, el de ayudante en una tienda de tejidos y ropa. Allí aprendí a hacer recados, liar telas, colocar las camisas en las cajas de donde habían salido, a llevar los maniquíes a la trastienda y poco más.
Ah, casi lo olvidaba: los dependientes de aquel gran almacén me enseñaron el doble fondo del vestuario de señoras.
Ah, casi lo olvidaba: los dependientes de aquel gran almacén me enseñaron el doble fondo del vestuario de señoras.
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2 apostillas:
Pues yo uso esta página. Porque la otra no va. Y ésta es mucho más onita :)
El paraíso de cualquier niño.
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