Fragilidades

30.9.09



¿Tendrá que ver algo lo frágil de las relaciones afectivas con ese adiestramiento como consumidores?

5 apostillas:

Juan Poz dijo...

Muy perspicaz, Francisco. Desde luego, si el consumismo nos empuja a consumir líderes políticos que pasan de ser la Esperanza, así, con mayúscula inicial, a ser traidores en menos de un año, ¿por qué no va a actuar el mismo mecanismo para las relaciones afectivas? Yo me inclino, sin embargo, como explicación de ese fracaso mercantilista, por el individualismo mal entendido que degenera en egoísmo, egocentrismo y egotismo: no cabe, con tres "ángeles" de la guarda como esos, que el cuarto, el desprendimiento, la entrega, el amor, se abra paso y nos señale un camino transitable. Quien lo haya, el camino, ¡qué cerca está de la verdadera felicidad!

Joselu dijo...

No sé si es un planteamiento conservador pero da la impresión de que las relaciones afectivas también se ven influidas por la filosofía del usar y tirar, frente a la estabilidad (no sé si necesariamente buena) de dichas relaciones en otras épocas pasadas. Pues sí, y como dice Juan Poz, la observación es aguda y perspicaz. No sé si a partir de ahora habremos de regirnos también en ese terreno por la regla de las tres erres: reducir, reutilizar, reciclar. ¡Quién sabe!

Matías dijo...

y claro que tiene que ver, el consumismo es la gran enfermedad de las sociedad, que aprender a estar siempre insatisfechos...

Matías dijo...

se nota que los numeros me atrofian el habla...

YoMisma dijo...

no, creo que es más bien la busqueda de la perfección que nos vendió Disney...

Y la libertad para cambiarlo antes impensable.

Saludos,
YoMisma