Miró el expositor de arriba abajo y de izquierda a derecha con ojos anhelantes. Luego dijo: «dame un pastel... aunque me muera.»
Inmolación
6.9.09
Miró el expositor de arriba abajo y de izquierda a derecha con ojos anhelantes. Luego dijo: «dame un pastel... aunque me muera.»
Etiquetas: cuentos diminutos
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5 apostillas:
Algo así me pasa cuando miro ansioso los cruasanes que sé que están cargaditos de colesterol; los miro y ellos me miran y al final, a veces, termino sucumbiendo y le pido uno a la panadera. ¡Qué placer!
Entro un momento para dar a conocer que Luis Valdesueiro ha abierto un blog en esta dirección:
http://lasesquinasdeldia.blogspot.com/
Para mí es algo así como un maestro. Nunca me canso de aprender de él.
A veces la tentación vive dentro.
Besoss
Al final resistió la tentación. No se comió el pastel. Pero no por eso dejó de morirse.
Subió al cielo. Vio dos puertas: "para los que se comieron el pastel", "para los que no se comieron el pastel". Abrió la que le correspondía mirando de reojo la otra.
(Disculpe el alargo. Un saludo)
! Cuantas veces pedimos el pastel de esa forma y luego nos arrepentimos!
Esta entrada me ha hecho sonreir
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