Politeicos

20.3.08



Los primeros cristianos abominaban de la idolatría y Pablo de Tarso mostró un Cristo extático, muy distante del Jesús de Nazaret carnal de los evangelios. Su prédica fue estéril y el sacrificio de aquellos inútil ante tanta imaginería penitente esta semana en la calles.

3 apostillas:

Anónimo dijo...

¿Y qué pensará Cristo del caso?

Don Peperomio dijo...

Paso a idolatrar las dos grandes esdrújulas que has usado.

Saludos varios

natalia dijo...

El Mundo es una primavera enferma-