Soñantes

26.9.07


El ser humano es un ser pensante pero, igualmente, también es un ser soñante porque la vida, como Calderón cantó, es sueño envuelta en el velo de maya. Ejemplos no faltan para ilustrar este axioma.

El matemático indio Ramanujan solía decir que la diosa de Namakkal le inspiraba las fórmulas en sueños. Al naturalista Louis Agassiz un sueño le ayudó a determinar a qué especie pertenecía un pez fosilizado cuyos contornos no se podían apreciar. La invención de la máquina de coser de Elias Howe se debe a un sueño en el que un grupo de caníbales le atacan con lanzas como agujas con un orificio en una de las puntas.

Descartes en un sueño encontró las bases de la geometría analítica y cómo hacer algebraica a la geometría. El químico August Kekulé esclareció la estructura del benceno porque su forma circular le surgió mientras dormitaba con un manual de Química frente a la chimenea. El inventor del helicóptero, Igor Sikorsky, cuando tenía diez años se soñó dentro de un enorme aparato. Treinta años después mientras revisaba la construcción de un Clipper descubrió que su interior era el mismo de su sueño infantil.

Steveson declaró que el hilo argumental en El extraño caso del doctor Jekyll y mister Hyde fue producto de un sueño, incluso cuentan que John Lennon soñó con el tema Imagine antes de componerlo.

Mis sueños no arreglan el mundo pero hace unas noches, al despertar en mitad de uno de ellos, recordé este ‘post’.

Zeitgeist

25.9.07



Término del idioma alemán –espíritu (Geist) del tiempo (Zeit)– que se refiere a que una idea extraña o singular para poder ser considerada y aceptada por una civilización es necesario el transcurso de una determinada cantidad de tiempo. El Zeitgeist de nuestros días no cabe duda que es Internet y su criatura las bitácoras.




Discurso en el espejo

24.9.07



«Frente a la eternidad de mi no existir está mi existencia. Eso es un breve trazo de tiempo, una raya en el agua, donde me sostengo para escribir estas letras. Respirar, nutrirme, amar: impulsarme en las constantes vitales. Soy por tanto un portento sustraído a la nada y me emociono al saberlo. Me emociono por la vaguedad de mi entelequia que es capaz de conspirar en vida contra toda su nada».

Autoayuda

23.9.07



A saber: un psicólogo que promociona entre sus pacientes la autoayuda cuando cae en una depresión ¿a quién acude? ¿Lo atiende Bucay o Coelho?

Tendencias

22.9.07


La condición humana siempre estará más inclinada hacia un infierno ardiente de pasión que hacia un cielo tedioso.

Tratamientos

21.9.07



Entre el y el usted hay un abismo. El tuteo es cómodo, cercano y amistoso. El usted es distante, desconfiado y frío, pero respetuoso al trato. Por eso me sorprende que ante cualquier usted se diga, sin reparo, «tutéame; no me hables de usted que parezco mayor». ¿Y no es a los mayores a quienes se debe tratar con respeto? ¿Por qué nos espanta, entonces tanto, que una persona más joven se nos dirija hablándonos de usted?

 

A la vuelta del tiempo

20.9.07




En los últimos treinta años, cada vez que se marchaba de aquella oficina, tras una larga jornada de trabajo, sentía que olvidaba algo. Después recapacitaba: «mañana veré».

Un día no pudo aguantar más esa sensación y volvió para ver qué era. Entonces descubrió, asombrado, que se había dejado allí su vida, sentada en aquella silla junto a la mesa. La reconoció por ser tremendamente joven y entusiasta. Utópica y arriesgada. Pero sobre todo inusada. «Si pudiera recogerla», pensó. Y se marchó, entristecido. Más que nunca.



Una salud de hierro

19.9.07



Hay personas que frente al síntoma de una enfermedad relativizan su importancia y demoran su visita al centro sanitario, aunque después les puedan diagnosticar un cáncer y mueran. Apenas suelen quejarse y aguantan el dolor de forma estoica a lo largo de su vida.

Hay otras, en cambio, que apenas le duele un padrastro acuden al médico con urgencia, atemorizadas porque se pueda producir el desenlace de una enfermedad terminal. Quejosas y temerosas suelen morir con muchos años.

Dualismo

18.9.07


La ambición de Descartes, el primer dualista efectivo de la mente y el cuerpo, fue encontrar una fórmula con la que poder concordar al Papa y a Copérnico, algo que nunca consiguió solucionar. Este fracaso abunda en su filosofía al querer separar el pensamiento del cuerpo que lo cobija. Antonio Damasio, neurólogo, en El error de Descartes, señala que alma y espíritu son estados complejos pero únicos de un organismo, algo que aleja al filósofo francés de su verdad.

Señales disuasorias

17.9.07



Te advierten del tabaco que mata, del perro peligroso que muerde, de no cruzar en rojo, de no beber más de la cuenta, de no maldecir ni señalar con el dedo. Te previenen sobre el sexo, las drogas y la amoralidad. Te avisan de todo menos de lo esencial: la toxina del tiempo.

El amolador

16.9.07



Cada vez que el afilador aparecía por el barrio con su piedra de amolar y hacía sonar su flauta, una lluvia de objetos le caía encima. Todos los residentes en aquella vecindad eran creyentes de la vieja tradición: cuando el amolador hace sonar su pito se levanta viento de poniente y se lleva las nubes.

Fatigas

15.9.07



«La vida es tan extenuante que al final acabas sucumbiendo. Hasta entonces no hay que claudicar a su tráfago», postulaba ante sus discípulos el pensador heleno Clitómaco. Apaciguador su pesimismo pragmático.

Maquinación

14.9.07


Ned Ludd destrozó por accidente hacia 1779 varias máquinas textiles y su acción sirvió de base a un movimiento obrero denominado ludismo opuesto a la revolución industrial. Hoy el neoludismo combate la revolución digital, la inteligencia artificial y el desarrollo de la informática.

La herencia de Ludd es el sueño de un cracker perforando la conciencia de nuestras computadoras.

Atrapado

13.9.07



La metafísica del blog me tiene encerrado en este cometario y no me permite ir ni al post editado ayer ni al que está por llegar mañana. Un fastidio quedarme aquí, tejedor de estas letras, hasta acabar la tarea.

Olvido

12.9.07



Syna, transida de dolor por la separación de su amante, comió flor de loto para borrar de su memoria aquel amor y encontrar la serenidad.

Pasados los años volvió a estar frente a él y aunque lo reconoció nada más verle, en cambio no pudo recordar nada de cómo fueron los besos y las caricias pasadas.

Perdedores

11.9.07


Cuando una persona habla de que es un perdedor ¿lo hace desde el punto de vista de la pérdida (perder algo o a alguien) o lo dice porque su situación es la antítesis del triunfo que en el fondo anhela?

Nos enfrentamos al fracaso desde modos distintos: hay quien lo entiende desde el dolor por haber sido apartado de una vida digna. Y quien lo entiende como una frustración que envidia el triunfo de otros.

Opuestos

10.9.07



Sainte-Beuve personaje contradictorio, escéptico y apasionado por la literatura, ejerció la crítica literaria y practicó la escritura sin mucho éxito. Defendió que la obra de un escritor era siempre el reflejo de su vida y podía ser explicada a través de ella: su máscara. Algo que me trae a la mente aquello que reza en algunos blogs: «eres lo que escribes, eres como escribes». Proust opuesto a este autor creó Contra Sainte-Beuve, obra en la que se puede leer: «la realidad verdadera es interior».

Amebas

9.9.07




Cuando estudiaba biología era fascinante observar el mecanismo de la ameba por su sensata estrategia ante la vida. En ella se adivinaba la voluntad de un destino: atrapar cuerpos extraños hasta diluirlos en sí misma para continuar adelante.

Similar destreza para aquel corazón que hostigado por la dureza de algunos sentimientos extraños los fagocita hasta disolverlos en su interior y así poder latir a su ritmo.



Querencia

8.9.07



Tras amarrar a una silla y acuchillar a su octogenaria madre intentó acabar, igualmente, con la vida de su progenitor, al haber descubierto un supuesto complot contra él.

El amor a los hijos es siempre un acto prolijo. Más el amor a un hijo esquizofrénico representa la exasperación del sentimiento: querer a quien te quiere matar y no poder desprenderse de ese amor.

Los médicos de la peste

7.9.07



Un infectado de peste era un maldito. Para evitar que la enfermedad-damnación se propalara entre quienes atendían a las víctimas de este mal, los médicos usaban una máscara profiláctica que recordaba a un ave apocalíptica, con unas gafas negras para filtrar el mal de ojo. Su espantosa presencia debía ayudar a morir del susto a los desahuciados, tras invocar la sentencia: «para poca salud, mejor ninguna».