Descrédito

2.11.08



El desprecio es la primera certeza sobre el camino andado. El resto lo completa la envidia.

8 apostillas:

dijo...

Otra afirmación con la que estoy totalmente de acuerdo.
Primero desvalorizan tu trabajo (el camino andado) luego, quieren imitarte, y con solo mirarte se nota la envidia. Y eso es aunque el camino no sea "bello" ni sea inmaculado, cualquier camino andado es víctima de estas dos malditas.
Besotes!

M. Domínguez Senra dijo...

Precisamente ayer estaba yo pensando: "Mira, todos cuantos hace un par de años despreciaban mi blog (el hecho de perder el tiempo en un blog, habría que decir), ahora todos han abierto uno".
Lo que ocurre es que las cosas hechas a impulso de la envidia tienen otro halo.
Estoy totalmente de acuerdo con Enredada y contigo y sin embargo no os desprecio.
Besos.

Joselu dijo...

A veces te encuentras sentimientos distintos y menos tenebrosos, pero estos existen y más en este país.

Maybe dijo...

Ciertamente van de la mano...
Saludos.

V a v o dijo...

como canta por ahi un viejito: no dejes que te impidan galopar ni los ladridos de los perros, ni las quijadas de caín.

Filoabpuerto dijo...

La envidia y el desprecio nos desacreditan.

Ambas "perlas" son síntomas de la propia debilidad

Saludos.

Merce

Juan Poz dijo...

¿Y quién mira hacia el camino andado cuando lo mejor está aún por venir? Y los que envidian lo que hacen es envidar sin juego en las manos. Literalmente: están fuera de juego, se lo pierden. Ya lo decía Bergamín, que quien sale del laberinto lo pierde, porque lo propio del laberinto no es salir, sino permanecer en él.

Maria Coca dijo...

Y por último, la indiferencia.


Más besos