Ese maldito tú

22.11.08



El ser humano se defiende de sus semejantes armándose con una carga de prejuicios. Blindado por los recelos se siente menos vulnerable para afrontar la disputa con el otro. Y en esas condiciones el yo termina como ganador.

4 apostillas:

Joselu dijo...

Si puede, pero muchas veces el yo es perdedor. Es una pugna dura.

Juan Poz dijo...

Quien se defiende es que teme ser atacado porque él está dispuesto a ofender y esperar la defensa del otro. Pero no siempre es así. A pesar de mi escepticismo genético, reconozco en mí un movimiento inicial de apertura hacia el otro, cualquiera. Luego ya llegará el desengaño. Mientras, me aferro a la ilusión del descubrimiento.

3'14 dijo...

Está claro que el prejuicioso se debe por que arrastra una carga de inseguridades e inaceptaciones de las propias miserias. Por lo tanto, una victoria bastante vácua, ¿No crees?

^Â^ dijo...

Es triste que hoy día todo gire hacia el yo.
Me encuentro como Juan siempre mirando a la ventana exterior lanzando aviones de amor hacia lo desconocido, sin más respuestas que recelo, prejuicio, rencor y o odio.
En otro orden de cosas.
Recuerdo que a mis veinte años me compré una camiseta de esas con mensaje, donde este decía: Warning contiene resentimiento odio y/o celos. Pura ironía.