Pomposos

La humildad robustece la integridad de quien la ejercita; el orgullo y la vanidad, en cambio, apocopan cualquier capacidad.

Cartesiano

Ningún decoro en la admiración, toda la dignidad en el respeto.

Ímpetus

La escritura siempre está llena de referencias de otros autores, escuelas o estilos literarios anteriores, aunque siempre es posible desprenderse de casi todo ese bagaje y lanzarse al vacío.

Rostros

La serenidad es el semblante de la sabiduría.

Verificación

Todo progreso humano viene avalado por el ensayo-error.

Sanción

Me pareció un abuso de autoridad que la mujer policía me multara por exceso de velocidad en la mirada.

Sosiegos

Para alcanzar la paz personal hay que acabar con todos los litigios interiores.

Métodos

La mejor disciplina es la que se instruye uno a sí mismo sin contemplaciones.

Vicisitudes

Igual que el árbol no sabe de su sombra, ignoramos la amplitud de la influencia que tienen nuestras acciones en los demás y en el suceder del mundo.

Traspiés

No te preocupes por tus equivocaciones, inquiétate en todo caso por la indulgencia de quienes han de soportar tus errores.

Encarnaciones

La conciencia de lo vivido es lo que nos significa.

Naufragios

La soledad es como un pecio hundido en una marea humana, restos de ausencias y abandonos.

Consejos

Siempre que cruzaba la calle con los ojos cerrados podía ver a su madre.

Empaque

El problema de la mentira no reside en su esencia sino en su apariencia.

Subterfugios

La falta de respuestas claras siempre ha proporcionado soluciones falaces a los embaucadores. Las vitrinas sociales están repletas con las figuras de pitonisos y ladinos.

Prácticas

La creatividad requiere ser muy rutinario en aquellas cuestiones que son insignificantes y nimias.

Cronometría

Existe un tiempo que transita dentro del tiempo en dirección contraria. Un tiempo sentimental y memorístico, registro inexacto de las horas.

Inciviles

De niños malcriados, adultos adulterados.

Absurdos

Las ideas más disparatadas suelen ser las más atinadas.

Obstinaciones

Quienes con más ahínco tratan de encontrar la felicidad resultan ser las personas más infaustas.