El qué

10.4.11



Ocurrió pero nadie lo supo.



Voces públicas

9.4.11



«Conozco a alguien que tiene más espíritu que Napoleón, que Voltaire, que todos los ministros presentes y futuros: la opinión pública», defendió Charles Maurice de Talleyrand. Ello sin cuestionar que la opinión pública exista como tal, y sí es así que la escuchen, y después que determine las decisiones a tomar. Espíritu sí, si lo tomamos como carácter o entereza, pero poco más.



Anyparxía

8.4.11



El término griego alude a la no realidad, es decir al ilusionismo de la existencia y sirve a Sexto Empírico de orientación hacia el escepticismo, quien en el abandono de enjuiciar la realidad encuentra la serenidad de espíritu por azar, «igual que la sombra sigue al cuerpo».



Nuevos parámetros

7.4.11



A medida que la tecnología ha permitido aumentar la cantidad de información y una mayor velocidad en la circulación de datos, el conocimiento se ha quebrado en finísimos y multitudinarios fragmentos.

Fruto de este nuevo panorama sus consecuencias te hacen, por ejemplo, participar de experiencias como estar por la mañana junto a unos chavales en un recital poesía que promocionan desde su blog de clase, y por la noche con los chicos de Twitter mientras ponen en ridículo a los europarlamentarios.



Mecánica delusoria

6.4.11



¿Es falaz la imaginación?



En el dentista

5.4.11



—Siéntese y abra la boca.
—De acuerdo.
—¿Ha leído a Maquiavelo?
Parpadeé una vez en señal de asentimiento.
—Según su doctrina política quien engaña encontrará siempre quien se deje engañar.
—(...)
—También dice que el vulgo se deja seducir siempre por la apariencia y el éxito.
—(...)
—O que la experiencia siempre ha demostrado que jamás suceden bien las cosas cuando dependen de muchos.
—(...)
—Maquiavelo afirma que la liberalidad se devora a sí misma, pues a fuerza de ejercerse se agota.
—(...)
—Y que los hombres ofenden antes al que aman que al que temen.
—(...)
—Pero además los hombres rara vez tienen el valor suficiente para ser o extremadamente buenos o extremadamente malos.
—(...)
—Para mí que sus palabras tienen una cierta actualidad. Ya puede cerrar la boca.
—Gracias.

Epítema

4.4.11



No nos reconocemos en los otros y esa falta de visión nos nubla el conocimiento y la reconciliación mutua.



Óbito

3.4.11



Me muero de contento -dijo-. Y, felizmente, fue enterrado.



Avistamiento

2.4.11




Deleuze explica que «no nos contemplamos a nosotros mismos, pero no existimos sino contemplando, es decir, contrayendo aquello de los que procedemos (...) todos somos Narciso por el placer que experimentamos contemplando (autosatisfacción), aunque contemplemos algo muy distinto de nosotros.» Atrapados en el espejo de la abstracción miramos, en los demás, aquello que nos representa a nosotros mismos.




Aritmética vital

1.4.11



Sofrón de Siracusa, pronunciador de «la muerte nada es para nosotros», defendió la geometría de los cuerpos y planteó que «la línea recta (hombre) es la perfección; el círculo (la mujer) la armonía». Hoy las relaciones humanas están practicadas de un álgebra amorosa combinatoria que da como resultado figuras casi imposibles de delimitar.



Catalepsia comunicacional

31.3.11



Mi amigo Arsenio que gusta ejercer, tras una copa de vino, de filósofo mundano, pregunta siempre que escucha sonar un teléfono móvil, qué sería de nosotros sin esta tecnología doméstica. Recuerda entonces cómo no hace tantos años se trabajaba y se vivía sin este aparato. Su hilo de reflexión le lleva a señalar que todo era menos ajetreado y que la comunicación, en mayor grado, era directa. Mantiene que esa forma de vivir no es saludable para nuestros estados mentales y que estamos bajo los efectos de una suspensión vital permanente por el desplazamiento del yo hacia otros lugares de la realidad. Tras su tesis no puede exponer su conclusión. Suena su teléfono móvil. —Es el espíritu de mi jefe— señala. Y se marcha.



Aprendizajes

30.3.11



¿Qué animal se ocupa de mirar en el fondo de aquello que ha sido?



En el autobús

29.3.11



―Se le saluda señor Albert. Tome asiento.
―Gracias.
—El mundo vuelve a estar calentito.
―La tiranía totalitaria no se edifica sobre las virtudes de los totalitarios sino sobre las faltas de los demócratas.
―Sí, pero no me dirá que la cosa tiene su polémica.
―Uno no puede ponerse del lado de quienes hacen la historia, sino al servicio de quienes la padecen.
―Es un punto de vista.
—Adquirimos la costumbre de vivir antes que la de pensar.
―Es posible, no lo niego.
―En el apego de un hombre a su vida hay algo más fuerte que todas las miserias del mundo.
—De todas formas no deja de ser una desgracia.
―No ser amados es una simple desventura; la verdadera desgracia es no amar.
―No todo el mundo está dispuesto a reconocerlo.
—Bendito el corazón que se puede doblar porque nunca se romperá.
―Así sea.
―Señor Camus. Me bajo en esta parada. Que tenga buen viaje.
—Por cierto qué tal le va con su escritos.
―Cada día lucho con ellos.
―Recuerde que los que escriben con claridad tienen lectores; los que escriben oscuramente tienen comentaristas.
—Lo recordaré. Adiós.


Escudriñamiento

28.3.11



Si miro al interior me abismo, si lo hago hacia afuera me derrumbo. Sólo la ciega indagación del mundo procura alguna calma.



Delación

27.3.11



Había cometido el crimen perfecto ¿o no? El asesino lo sabía.



Poder demoniaco

26.3.11



Cada cierto tiempo me gusta volver a la lectura obligada del Diccionario del Diablo. En su entrada Pandemónium, que viene a ser la capital imaginaria del reino infernal donde están todos los demonios, y que según explica Ambrose Bierce, «la mayoría de ellos han ido a refugiarse en la política y las finanzas», algo que da a entender que vivimos un momento diabólico.



Montón

25.3.11



Crisipo de Solos que murió fruto de un ataque de risa, tras ver como su burro al que había emborrachado con vino intentaba comerse el fruto de una chumbera, estoico y practicante del razonamiento progresivo, elucubró que «ser más listo que nadie en un mundo de mediocres no te salva de nada. Oponer la inteligencia a la estupidez es una batalla perdida. Hay más del otro lado».



Contador

24.3.11



Los tontos y los locos son el instrumento más eficaz para que la sociedad mida el grado de cordura del resto de sus individuos.



Antítesis paradigmática

23.3.11



¿Creer en lo que pensamos o pensar en lo creemos?



Dos amigas

22.3.11



—Este es el siglo de las mujeres.
―Y qué vamos a hacer con tanto tiempo.
―Además de reparar todas las desigualdades lograremos que el poder tenga más rostros femeninos.
―Y piensas que si las mujeres mandan el mundo mejorará.
―Seguro, será muy diferente al de los hombres.
―Leí, en alguna revista, que lo más que han conseguido las mujeres es acostarse con el hombre que quieran.
―Eso es una exageración.
―Vale pero también es verdad que algunas mujeres lo que han logrado es igualarse a los hombres en los aspectos más soeces.
―Bueno porque el ser humano un fondo común sea cual sea su género.
―También muchas mujeres son quienes validan cuestiones tan alienantes como la religión o la moda.
―Algo que no impiden a otras hacer todo lo contrario.
―Eres una optimista.
― Y por qué no, quizás valga la pena.