Existencias

22.7.19



A cada instante somos observados, medidos y estudiados. A través de miles de definiciones nos dicen cómo somos, cómo pensamos y cómo actuamos. Interpretan nuestros deseos y nuestros sueños, publican en qué nos estamos convirtiendo, nuestro estado mental, nuestra salud, nuestros biorritmos y lo que debemos de corregir. Aparecemos bajo la sospecha de no estar existiendo bien o con el uso correcto y eso nos aniquila como personas y arruina nuestra plenitud. Tantas definiciones nos están matando.



3 apostillas:

mailconraul dijo...

Aunque nuestra existencia pueda ser especial, nuestra insistencia no.

Albada Dos dijo...

Y qué verdad. A ver si se da el caso de que no nos midan, y ya no existamos.

Un abrazo

Joselu dijo...

Antes las dictaduras eran generales, sistemas que aplastaban la libertad con policía, delatores, cuerpos de seguridad...pero ahora la dictadura es ubicua, adaptada a cada uno, a sus peculiaridades, a sus pulsiones más secretas a nuestros hábitos como consumidores... Nos conocen mejor que nosotros a nosotros mismos. Las redes sociales, google, Alexa, todo hace que nuestra vida sea transparente para los que nos observan. Desde el momento que tenemos un teléfono móvil estamos absolutamente controlados, escaneados en todos los sentidos. No hay forma de escapar a ello. Ni siquiera podemos decir que no tenemos móvil pues en las aplicaciones bancarias te envían mensajes de confirmación para hacer operaciones financieras. El ser humano nunca ha existido de un modo tan planificado, es una dictadura light que cuenta, para más inri, con nuestra aquiescencia y conformidad.