El precio del oro

7.9.10




El rey Midas continuó transformando en oro todo lo que tocaba. Hasta tal punto hubo abundancia de este metal que su valor se depreció y llegó a valer como el hierro viejo.


Declinaciones

6.9.10




Este niño sabe hablar latín ―defendió la madre muy ufana―, lo que llevó al profesor a preguntar al pequeño de cuatro años sobre el ablativo singular de la tercera declinación del verbo saber.



Visión

5.9.10




Bajo la lluvia vio la realidad codificada.



El adúltero

4.9.10




Me ha adoptado un perro. Ahora soy fiel.



Chiste

3.9.10




El general arengó a la tropa y los soldados se partieron de risa. No hubo batalla.



Acompañante

2.9.10




Nadie le había dado vela en ese entierro y caminó a oscuras hasta el cementerio.



Escribiendo

1.9.10




Un gerundio, muy chulito, vino a estropearme el cuento.



Hidrófilo

31.8.10




Se bebió la hache dos veces y apuró la o hasta ahogarse.



La maldición de los números

30.8.10




Un hindú sentado en una piedra frente a un riachuelo pensó en el cero y enloqueció.



El decapitado

29.8.10





Olvidó la cabeza en su casa y comprobó que podía actuar de igual manera.



Paleontología

28.8.10




Buscaron la virginidad perdida y no hallaron otra cosa que un vacío sexual.



Ratón de biblioteca

27.8.10




He devorado miles de páginas y no dejo de ser un inculto roedor.



Vecindad

26.8.10




La encontré al entrar en el ascensor. Me miró a la cara y me dijo: «piensa lo que quieras pero piensa.»



Mocedad

25.8.10




Marta sopló las velas, miró a su alrededor y el mar ya no estaba.



2.001: una odisea en el ciberespacio

24.8.10



A diferencia de Ulises esta mía es una odisea sin tintes heroicos pero que, en este punto, ha cruzado el horizonte de los dos mil 'post'. Hasta esta cima llego ahíto y extenuado pero como en los versos de Cavafis, deseo que el camino sea largo: «Mantén siempre a Ítaca en tu mente./ Llegar allí es tu destino./ Pero no tengas la menor prisa en tu viaje.»

Nunca me he sentido solo en la travesía porque en mi nave viajan, como con Jasón los argonautas, los blogueros que me siguen, los amigos que me alientan, los lectores invisibles, los hijos que me han nacido y los seres que me quieren.

En estos años mis coordenadas vitales han variado tanto que apenas me reconozco en aquel que anotó las primeras palabras de este cuaderno de bitácora, un lugar que no es más que una pequeña luz en el inmenso universo de los 'blogs' y su tiempo.

Y ahora, por favor, que nadie me pida que vaya a por los tres mil, sería como una losa para quien sólo aspira a escribir el 'post' de mañana, el 2.002.

Esta es mi celebración y mi sencillo homenaje a todos vosotros.





Nota del autor.- Bajo el título genérico de 'Elogio de la brevedad' los próximos días en este blog aparecerán una serie de micro relatos para relax de los lectores y descanso del autor, ahora que se acerca el final del verano.



Esclarecimiento

23.8.10



Cito a Foucault: «No me pregunten quién soy ni me pidan que siga siendo el mismo.» Mañana explicaré el porqué.



Campaña de imagen

22.8.10




El diablo anunció en rueda de prensa que la mitad de sus malas acciones estarían destinadas a combatir la pobreza.



Alétheia

21.8.10



Constantemente me cuestiono como método de introspección. Ponerme en duda es entenderme.



Seres inútiles

20.8.10



Según el Tao es la inutilidad lo que nos hace eternos. Aquello que es inservible permanece alejado de la voluntad destructora del deseo. Se comprende bien esto en las cosas y seres que nos acompañan siempre.



Neutros

19.8.10



Me considero un ser transfronterizo que se crió en un mundo donde era impensable un concepto como Internet. También un afortunado actor de una revolución sin precedentes. Entiendo, además, que los momentos bisagra, donde el devenir histórico de la humanidad pasa de una época a otra, han sido siempre los más sustanciosos. Igualmente los más perecederos.

Durante estos días y tras asistir al anuncio realizado por Google y Verizon para cobrar servicios especiales en Internet, me volvió la idea de una 'subinternet' que planea sobre nuestro futuro próximo. La neutralidad de la red, dentro de unos años, será una entelequia porque existirán internautas de pago. Otros andarán libres de peaje pero a cambio tendrán privado el acceso a muchos contenidos. Es el sino de los humanos.