Clientela

25.6.23



El insulto era un bar situado en la zona de vinos de la ciudad cuya notoriedad se debía a su maleducado dueño quien, mientras servía, increpaba a la clientela que sentía tal hartazgo que se marchaba del establecimiento borracha de regañinas.




1 apostillas:

José A. García dijo...

¿Los precios eran accesibles?

Saludos,
J.