Sabores

4.2.11



Piensas que con el paso del tiempo y los acontecimientos vividos tus sentidos cambiarán. Y no es así. Más allá de tener pareja o procrear, encontrar un trabajo o ser un paria, tener pose de vividor o ser una persona desprendida, la tristeza continúa oliendo a humedad, el dolor sabe agrio, la soledad amarga, el llanto ácido y el miedo astringente.



2 apostillas:

Anónimo dijo...

Hola, ¿no te sobrarán diez euros?

(PeterPank)

Juan Poz dijo...

Estos son los pródromos de la desesperación...