Sensateces

13.4.18



No intento tener razón, sólo que exista un mundo razonable.



Cincuenta céntimos

12.4.18



Los días son ásperos entre la gente con la que me cruzo, apenas miradas, por supuesto ningún saludo y menos aún una sonrisa. Sin embargo, son gestos necesarios que esponjan el ánimo y elevan la condición humana. 

En el recodo de una calle, por donde paso a diario, una persona sin hogar me mira a los ojos, me sonríe y me desea que tenga un buen día. En el suelo, junto a un cuenco con monedas, un cartel advierte: ’50 céntimos’. 

Es un aprecio regalado.



Acicalamientos

11.4.18



Hay que despiojar el pensamiento de las ideas que lo parasitan.



Cuantificaciones

10.4.18



Al final de todo, antes de desaparecer, importa saber cuánto has amado.



Distracciones

9.4.18



La vida, ese fugaz pasatiempo.



Flagelación

8.4.18




El hombre látigo se sentía azotado por las deudas.




Adulterados

7.4.18



Hoy hasta la felicidad que se consume está hormonada.




Porfías

6.4.18



Es la tenacidad por vivir lo que nos salva.



Disipaciones

5.4.18



Formados como consumidores terminamos por consumir incluso las relaciones afectivas.



Evoluciones

4.4.18



La civilización más que suprimir la barbarie la perfecciona.



Decoro

3.4.18



Hasta cuando nos equivocamos debemos de tratar de ser honestos.



‘Aforismando’

2.4.18



—A propósito de los aforismos, señor Jorge Wagensberg Lubinski, ¿no piensa que es un género bastante desprestigiado? 
—El aforismo es el más objetivo, inteligible y dialectico género literario. 
—El tiempo lo dirá. —El tiempo pasa, siempre acaba pasando, es sólo una cuestión de tiempo. 
—Y de inteligencia que nombra las cosas. 
—La realidad es inteligible por la misma razón de que hay más ramas que árboles. 
—Nunca entendí por qué las ramas no me dejan ver el bosque si son el mismo bosque, solo es cuestión de imaginación. 
—Lo improbable asombra a todo el mundo, lo cotidiano sólo al genio. 
—¿El genio no tiene dudas? 
—Sólo se puede tener fe en la duda. 
—Y en el conocimiento. 
—Las grietas del conocimiento científico se rellenan con pasta de ideología. 
—La cultura también nos llena de ruido. 
—Cultura es conocimiento transmitido por vía no genética. 
—El conocimiento es descubrir un sentido para gozar el mundo. 
—Conocimiento interdisciplinario: la naturaleza no tiene ninguna culpa de los planes de estudios vigentes en escuelas y universidades. 
—Eso es contradictorio. 
—Sólo hay una contradicción mayor que la de negar la democracia a los antidemócratas y es la de tolerar que éstos acaben democráticamente con la democracia. 
—La falacia del poder también nos destruyen. 
—Las mentiras se construyen, las verdades se descubren. 
—La vida nos edifica a través del pensamiento. 
—El cerebro se inventó para salir de casa y la memoria para volver a casa.



Fantasmagoría

1.4.18



Dos ancianos miran caer la tarde sentados en un banco junto a la carretera. Mis pasos de caminante me acercan hacia ellos. Les saludo, primero con una sonrisa y un leve movimiento de cabeza; después con un «buenas». Responden con amabilidad a mi cumplido. En medio de un rumoroso silencio, les digo que todo parece muy tranquilo y uno de ellos me revela: «en este pueblo, los que no están muertos se han ido». En ese momento se me viene a la mente Comala y pienso si no estaré hablando con dos fantasmas, o si ya seré yo también como uno de esos espectros.



Huecos

31.3.18



Todo tiempo es una ausencia de algo.



Doctos

30.3.18



El humor es el lado culto de la desesperanza.



Arquitecturas

29.3.18



La vida nos edifica a través del pensamiento.



Confín

28.3.18



La libertad de expresión no puede tener límites. En todo caso, consecuencias.



Gastronomía estelar

27.3.18



La comida favorita del Universo es la sopa de quarks y de gluones.



Aforística

26.3.18



Un aforismo acertado es el dardo clavado en el centro de la diana.



Hilos

25.3.18



Todo está tranquilo hasta que dentro de un instante suceda un crimen. Precedente a que ocurra este asesinato, está la persona muerta dentro de la vida y el asesino inocente. En el previo criminal al dolor y a la crueldad hay un destino sereno que nada hace indicar que sucederá lo que tiene que acaecer, que el caudal de tiempo determinará la muerte abrupta de una vida y la mente humana urdirá una atrocidad contra ella. Anteriormente a ser víctima, irá de compras y sacará dinero de un cajero automático, estando expuesta a la usura de la banca y al incómodo pensamiento que le provoca este abuso de autoridad económica, sin el menor presentimiento de azar opuesto a seguir su trayectoria vital. Antes el no homicida aún desayunará sin la culpabilidad de un asesino y mirará pasar la gente entretenida en su tiempo vital pensando, quizás, en una oportunidad para no tener que mancharse de sangre. Más atrás el lazo entretenido del destino que comienza a anudarse.