La escritura polimórfica

11.2.21



Una de las grandes ventajas de escribir en la era digital —al menos para mí— es poder hacerlo bajo el paraguas de la imaginación y la variabilidad de los textos, es decir publicar versiones de una misma idea o anotación bajo formas distintas, con perfiles distintos y en espacios diferentes para lectores con diferentes sensibilidades. Por ejemplo, en 2014 publiqué en uno de mis perfiles de twitter el microcuento ‘Risas’ con el siguiente texto: «Al reír el último río solo, no mejor». La idea me sedujo y la transformé en «Quien ríe el último no ríe mejor, solo ríe solo», y la publiqué en otro perfil. La historia no paró ahí y en una nueva publicación apareció como «Quien ríe el último no ríe mejor, ríe en solitario». Me temo que la cosa no parará y evolucionará hacia «Reír el último es reírse de uno mismo porque ya no queda nadie de quien hacerlo».




3 apostillas:

josia dijo...

Es el último en entender el chiste, es más lerdo.

Juan Poz dijo...

Quien ríe el último se ahorra el bobo "¿de qué te ríes?" que tanta alegría le quita a la risa...

Joselu dijo...

Polimorfismo digital infinito, jajajaja (¡¡¡me he quedado solo!!!)