Solazados

22.2.20



Si me inquieto mucho al escribir este texto, por ejemplo, sospecho que no me divierto. Y eso no me sienta bien. Sin la misma vocación lúdica que un niño pone en explayarse en el juego, sin la satisfacción de mezclar las palabras con las ideas igual que si te embadurnaras con el tarquín de las acequias y los balates, esta tarea apenas habría que tenerla en cuenta.



1 apostillas:

Albada Dos dijo...

Sin la vocación lúdica de un niño, escribir es hacer tesis, creo. Un abrazo