Bloc de notas
3.4.16
Meticuloso, ordenado y observador, siempre llevaba un cuaderno de notas para escribir todo aquello que ocurría alrededor de su existencia. Así cuando veía una pareja de novios describía como sería su insoportable convivencia conyugal futura. Si tropezaba con un sacerdote, lo sospechaba en una imagen desnuda en un burdel. Si acaso se trataba de un ama de casa distraída frente a un escaparate de moda, la imaginaba desfilando ante los espejos de su casa. Y si era el caso de un militar enhiesto lo pensaba en ropa interior repantigado en el sofá de su casa.
Su cuaderno engordaba por días hasta que, en cierta ocasión, debió de anotar: esta es mi muerte como escritor. Y se hizo el papel en blanco. Eso sí, pautado como los surcos de la existencia.
Etiquetas: cuentos de domingo, cuentos diminutos
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