Venturosos

24.3.22



Cuando escribes algo que no es recibido con entusiasmo por quien lo lee, te sientes raro. Pero es una frustración fugaz porque, al momento, recuerdas de la dicha sentida mientras te involucraste en su juego.



3 apostillas:

Cipriano Algor dijo...

Y automáticamente aparecen otras ideas

Juan Poz dijo...

Hay un interesante libro titulado "Aprende a no gustar"que quizás acabe siendo el manual de cabecera de las nuevas generaciones, tan hipersensibles... En mi niñez y adolescencia esas frustraciones las pasábamos"a pelo" con la única receta tradicional del "ajo y agua"...

Sidrina dijo...

vivimos a la espera de gustar al resto. Voto por un día al año de egocentrismo :).