Desde el puente

17.12.13



—Me maravillo de lo que he conseguido no ver.
—Tan importante como lo que se vio.
—A falta de saber, escribo.
—Y duerme tan tranquilo.
—No me remuerde la conciencia, sino estar consciente.
—Eso es quererse a sí mismo.
—El hombre es un egoísmo mitigado por una indolencia. 
―En eso se resume.
—Odiamos lo que casi somos. 
―¿Y qué somos señor Pessoa?
—Somos avatares de la estupidez pasada.



2 apostillas:

Chus dijo...

Soy el intervalo entre lo que soy y lo que no soy, entre el sueño y lo que la vida ha hecho de mí...
F.P.

Joselu dijo...

Tengo pendiente leer El libro del desasosiego. Tal vez después pudiera comentar este diálogo, lleno de elipsis y aforismos enigmáticos.