El verano no existe, es un paréntesis en la esclava beatitud del trabajo, una paráfrasis de la calígine, una jaculatoria del paraíso. El verano no existe, es una entelequia publicitaria. Es un tiempo de anhelos reprimidos, regresiones a la infancia, pesadumbrías, locuras y desmayos.
15-M:« Salud y alegría »
«Deben mantener la unidad y deben prepararse para una lucha larga. Nadie les dijo que fuese fácil, sólo es imprescindible para sobrevivir con dignidad.» Pascual Serrano, periodista y ensayista español.
1 apostillas:
Los veranos para mi blog representan una pausa indefinida... ahora sí que lo que pasa en la playa se queda en la playa.
Saludos Francisco, te voy a mandar un microtest, buscando algunos consejos, en una chanza te mando el archivo.
Publicar un comentario