Paseo

3.9.05


Caminaremos por la suave arena del rebalaje como si el tiempo no existiera. Te contaré cosas de cómo siento el mundo en un largo paseo mientras las olas bañan nuestros pies descalzos. La sensación de arena húmeda en la planta de los pies provoca momentos de sinceridad, nos desnuda de fingimientos y no impele a contar intimidades y sueños nunca confesados. Esta arena seguirá aquí cuando no estemos nosotros. El infierno no existe y en el cielo seremos todos ángeles. Los huesos se acortan con el tiempo por eso las personas mayores son más bajas. Los peces no duermen porque no tienen cama.


(Elvira, 8 años)

1 apostillas:

Rose Kavalah dijo...

La genialidad no entiende de edades