Frágiles

5.3.15



Neetzan Zimmerman señala que los contenidos en Twitter o Facebook se caracterizan por ser ligeros muy visuales y de baja intensidad, y que esa es la forma en la que nos comunicamos ahora. «Incluso las palabras son demasiado pesadas, así que nos comunicamos solo con emoticones y coqueteamos haciendo clic en ‘me gusta’. La atención es difícil de conseguir y los traficantes de memes que necesitan tráfico para sostener su modelo de negocio han recurrido a promocionar el contenido equivalente al móvil». 
La comunicación se ha fragilizado y fragmentado, se ha hecho volátil y nosotros son ella.



4 apostillas:

Juan Poz dijo...

Lo que está claro es que nadie escribirá, en el futuro, algo como "La fenomenología del espíritu"... ¿A dios gracias, habremos de añadir?

María dijo...

Claro JUAN por eso a finales del XVIII surgió el idealismo alemán y nosotros nos tenemos que conformar en el XXI con la filosofía de Matrix, apostaría que tú te leíste de cabo a rabo "La fenomenología del espíritu" y encima lo entendiste todo ;)

No soporto esa manera de hablar en modo Morse, me es imposible ...yo necesito mil palabras para decir hola! jaja

Muchos besos y feliz tarde para los dos.

Joselu dijo...

Sobre todo lo relevante de todo lo que se publica es que es irrelevante, no busca ni puede perdurar. Hubo un tiempo en que los movimientos duraban siglos, luego décadas, luego años, y ahora, llevando las vanguardias como el futurismo a su extremo, las cosas duran lo que un tuit, y ya es pasado, por tanto, inexistente.

Juan Poz dijo...

No pude con ella, María, deserté. Hegel "el oscuro" consigue aburrir a las ovejas, incluido Adorno, que nada tenía de oveja, ciertamente. De todos modos, la venden ahora en los quioscos de prensa, curiosamente...