Vacíos

30.1.15



Euríloco de Elis, discípulo de Pirron, planteaba que «no hay mayor paradigma que la desolación para entender cuál es el camino, ya que es ella la que más rápidamente nos impulsa al abismo». Eso es igual que decir a alguien que se acaba de tirar por un puente «ya te lo advertí».



2 apostillas:

María dijo...

Creo que es mucho peor, lo que él hace es inducción la suicidio o lo que es lo mismo, dice que la salida más rápida del vacío es tirarse por él:-)

Estás seguro que este Euríloco es discípulo de Pirron ¿No será discípulo de morrón ?


Muchos besos y buenas noches.

Joselu dijo...

No veo que la conclusión que deduces de la reflexión euriloquíca sea la única posible y además no es la más concluyente. La desolación nos indica el camino. Y nos impulsa al abismo. ¿Qué tiene de malo el abismo? El abismo no es tirarse por un puente sino acercarse a los límites de la vida en territorios no transitados y, ciertamente, peligrosos. Creo que el verdadero arte borde el abismo. Sin abismo no hay auténtica creación. Y sí, es posible que la desolación nos habrá caminos. Yo tuve un blog que se titulaba Desolación interior que tú conociste y que, amablemente, hiciste su más hermoso panegírico hace años. La desolación es muy rica -y probablemente dolorosa-,. No hay nada interesante que no sea una visión de abismo. La vida es abismo o puede que sea una sarta de estampas bienintencionadas de placer bobalicón como quien come compulsivamente dulces para calmar nuestro instinto de muerte. ¿Hay algo en definitiva que no sea peligroso? Queremos vivir en un mundo plano, rosa, liberado de aristas, asegurado ante la desgracia y lo imprevisto, un mundo a modo de parque temático de la felicidad de consumo a medida de los centros comerciales. Pero, pero... Euriloco de Elis nos abre los ojos para decirnos que -ojo- la desolación abre caminos que pueden conducir al abismo. Podemos irnos con Mickey Mouse con con Holden de Salinger. He ahí la elección no apta para paladares de digestión swagger. Bien por Eurliloco. A partir de ahora lo tendré como filósofo de cabecera como puse a mi padre un pterodáctilo en la cama del hospital para pasmo de enfermeras, monjas y visitantes que no entendían el juego conceptual. En fin. Son reflexiones ad hoc de una propuesta que creo que el ponente no ha orientado en su justa medida.