Charla por el camino de la luz infinita
27.7.16
—Señor Suzuki, cómo se usa el poder.
—El uso del poder es siempre susceptible de ser arbitrario, despótico y alienante.
—¿Cómo es el poder?
—El poder es siempre arrogante, dogmático y exclusivista, mientras que el amor es humilde y omnicomprensivo. El poder representa la destrucción, incluso la autodestrucción, del todo contraria a la creatividad del amor. El amor muere y vive de nuevo, mientras que el poder mata y es matado.
—El poder es tóxico.
—Quienes están embriagados de poder son ineptos para percibir que el poder es enceguecedor y que su horizonte interior es cada vez más estrecho. El poder está así asociado con el intelecto y hace uso de él en cualquier circunstancia.
—De ahí la ceguera del poder.
—Lo que es ciego no es el amor, sino el poder, pues éste se revela absolutamente incapaz a la hora de comprender que su existencia depende de algo distinto a sí mismo.
—El amor nos da lucidez.
—El amor fluye de la certera visión de la realidad tal cual es, y es también el amor lo que nos hace sentirnos responsables -individual y colectivamente- de todas las cosas, buenas o malas, que ocurren en nuestra comunidad humana.
—Es la energía vital.
—Es el amor lo que crea la vida. La vida no puede sostenerse sin amor.
—¿Y qué es amar?
—Amar es reconocer a los otros y tomarlos en consideración en todas las circunstancias de la vida.
Etiquetas: aforismo dialógico, Teitaro Suzuki
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 apostillas:
Blanco sobre negro... Lo fácil es difuminarse entre grises.
Publicar un comentario