Maquinaciones

31.10.14



Reconocía Diágoras de Melos, a quien desterraron por propalar el ateísmo, que «Dios siempre juega contra sí mismo y gana», algo que lo anulaba como ente. Suele pasar con los humanos que se dejan ganar ante sí mismos.



3 apostillas:

Joselu dijo...

¿Quieres decir, que a semejanza de Dios, nosotros como especie jugamos contra nosotros mismos? ¿Que jugamos contra nosotros mismos y perdemos? No sé que interpretación dar a esto, pero pienso en la exposición de Sebastiao Salgado en que se muestran los últimos reductos vírgenes del planeta que estamos destruyendo inexorablemente. Si lo aplico a esta interpretación sí que tiene sentido lo que dices. En cuanto al plano existencial, depende, no sé. ¿Jugar contra sí mismo y perder? Me falta perspectiva.

Juan Poz dijo...

La depresión es un juego oscuro contra uno mismo en el que pierde, ¡y sin hacer trampas!

Beauséant dijo...

Yo lo he interpretado como Joselu, somos un raza que constantemente intenta aniquilarse de maneras muy creativas...