Suspicaces

5.1.24


Desde la tristeza siempre es sospechosa la alegría.







3 apostillas:

María dijo...

jajaja Qué me vas a decir! el mero hecho de sonreír hoy, te convierte en sospechosa de lo peor, como si llevaras una granada en la mano sin anilla : )

Un beso!

Anónimo dijo...

Una broma falaz si nos atenemos al habitual regodeo de los gentiles. Pero..., bueno, si la felicidad es capciosa, la desdicha también es suspicaz.

Campurriana dijo...

No lo había pensado pero sí.