Anónimos

5.12.18



No hay que ser mitómano. Tras cada nombre famoso, estrella mediática o influencer, hay intereses económicos, una marca publicitaria o empresarial que quiere amortizar su inversión. Seguid a los humildes, a los sencillos, a los que no se nombra en los grandes medios.



2 apostillas:

Albada Dos dijo...

O no seguir a nadie, que tiene también su cota de libertad

Un abrazo

Juan Poz dijo...

No, cuota, no, ¡la totalidad! Usualmente, quien sigue "a alguien" es un auténtico "don nadie".