Clases de cinismo
18.11.14
—Busco un hombre honesto.
—¿Tan sólo uno?
—Cuando estoy entre locos, me hago el loco.
—Y cuando estás entre cuerdos…
—Cuanto más conozco a la gente, más quiero a mi perro.
—Eso es adulador.
—El elogio en boca propia desagrada a cualquiera.
—¿Y el insulto?
—El insulto deshonra a quien lo infiere, no a quien lo recibe.
—¿Las calumnias también?
—Las mordeduras más peligrosas son las del calumniador entre los animales salvajes y las del adulador entre los animales domésticos.
—Y entonces dejamos de ser libres.
—El único medio de conservar el hombre su libertad, es estar siempre dispuesto a morir por ella.
—Eso está por ver.
—El movimiento se demuestra andando.
—Y el conocimiento.
—La sabiduría sirve de freno a la juventud, de consuelo a los viejos, de riqueza a los pobres y de adorno a los ricos.
—Esa es una buena idea, señor Diógenes.
—Un pensamiento original vale mil citas insignificantes.
Etiquetas: aforismo dialógico, Diógenes de Sinope
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