Exégetas

26.2.15



Si importante es el texto no lo es menos el contexto. Sin contexto no hay texto. El texto sin el contexto es como sacar a un pez del agua. Vive poco y se ahoga.



3 apostillas:

María dijo...

Si hablamos de textos ajenos solo podemos intuir o vislumbrar someramente el contexto de un texto dentro de ese texto, nada más que eso. El contexto mental o circunstancial en el que fue concebido solo lo conoce - si acaso - su autor. Lo que ocurre es que cada uno le inventamos un contexto tan subjetivamente objetivo como queramos creernos en función de lo que supongamos saber de la obra.

No existen los exégetas, solo los eiségetas y luego están las morcillas en las obras de teatro jaja


Muchos besos!

Juan Poz dijo...

Cada texto crea su contexto, mal que le pese a éste. Lo deleznable es cuando a ciertos textos les meten otro contexto con calzador...

Joselu dijo...

No solo hay texto y contexto, también hay y muy importante, el subtexto, lo que subyace a veces inconscientemente en el texto o lo que otros creen ver en él.