Celajes

16.9.21



Cuanta más humildad mejor se aprecia el acto creativo. La vanidad del artista es un nubarrón en la observación del arte ajeno.



1 apostillas:

Juan Poz dijo...

¡Cuánto peores son esas dos "tachas" cuando son afectadas! Hay humildades congénitas del mismo modo que hay vanidades "justificadas" por los hechos. La crítica objetiva ha de guiarnos en esa discriminación.
[Un abrazo tras las "vacaciones", Francisco]