Vacunas

21.9.12



Cada vez que charlaba con él terminaba repitiéndome lo mismo. «Igual que de pequeños tratan de inmunizarnos, inoculándonos agentes patógenos para que nuestro sistema inmunológico aprenda a tener una respuesta, deberían bakuniarnos contra los virus de la ignorancia y el pensamiento corrupto.» A Daniel le gustaba jugar con el nombre de su admirado Bakunin y recordar así su experiencia juvenil de anarco.



1 apostillas:

Juan Poz dijo...

Ojo con los juegos nominales, porque quien esté bakuñado muy probablemente cae en ese vicio tan hispánico del nepotismo latino.