Supports

26.12.05

Maria Adela did a confession to me. "In the love it is not good for being bound to a single person. He is better to have a husband, a lover and a friend. Some of them, in a while given, can serve you as salvation table ".

Embeleso

-It would pass the eternity without leaving Me of mirarte. And it would not be enough.

Fruición

The good side that they break to you in heart is that later you can distribute the pieces between much people.

Telepathy

While I wait for turn in market two women gave a marital piece to me.
-My husband, sometimes, it says to half of which it thinks and it finishes to think that everything has been understood to him what it has said - refers the first woman -.
-You do not worry, that is telepathy. She is so that you listen to its thoughts, as the women we have the developed brain more than the men.
-That will be- it answers while it becomes towards the tendero and it requests quarter and half to him of chóped.

Waste

There are two things in which one is due to be generous until the waste: when one cooks and when it is loved.

Radicales


Todos los pulgones del rosal son hembras y se reproducen por clonación. En cierta ocasión escuché una tesis feminista que pronosticaba para la humanidad un futuro semejante.




(e)Videntes




Cada vez que llegamos a finales de año suelen aparecer los (e)videntes. No suelen acertar ningún pronóstico, evidentemente, pero como nadie se acuerda después de lo que han dicho todo se olvida.
La historia de los adivinos la resume una anécdota de la infancia sobre un personaje que siempre acertaba qué tiempo iba a ser al día siguiente.
El hombre del tiempo, como lo llamaba la chavalería, solía aparecer de vez en cuando y predecir con certeza si mañana haría sol, llovería o soplaría fuerte viento.
Años más tarde descubrí en qué basaba su ciencia. El hombre caminaba de un barrio a otro de la ciudad y en cada uno hacía un pronóstico. «Mañana lloverá», decía en un lugar; «tendremos bueno», apuntaba en otra barriada; «soplará el poniente», predecía en otra parte.
Si al día siguiente llovía, por ejemplo, sólo tenía que pasar por aquellos lugares donde anticipó lluvia. Era (e)vidente.



Espejismo




A Diógenes Laercio se le escuchó decir en una ocasión: «A veces hasta parezco un tipo feliz y me sorprende».



Derroche

25.12.05


Hay dos cosas en las que se debe ser generoso hasta el derroche: cuando se cocina y cuando se ama.

Ciclos


Enfrentarse por primera vez al mundo no es inventarlo de nuevo aunque lo parece. Vivir es repetirse.

La llamada



Suena el teléfono.
—¿Sí? Dígame.
—Hola. Soy tu amigo Carmelo. ¿Cómo estás?
«Y este qué querrá ahora».
—Hombre Carmelo cuánto tiempo. Estoy bien. ¿Y tú?
—Yo también voy bien. ¿Cómo están las cosas en el curro?
—Bueno, no me puedo quejar, la verdad.
—No, mira te llamaba para pedirte un favorcillo. También para saber cómo estás, claro.
Me extrañaba que después de dos años llamara para saber cómo estoy.
—Tú dirás.
—Es para ver si me puedes dar los números telefónicos de unos contactos.
Tras una larga charla y el favor concluido, nos despedimos con la sensación de haber echado un buen rato de cháchara.
Al final pienso: «menos mal que existen los favores. Sin ellos cómo íbamos a saber de los viejos amigos».

El peso de una pluma

24.12.05



Una vieja leyenda de los pueblos del desierto, que remonta su influencia a la mitología egipcia, cuenta que el corazón de un amante debe de pesar igual que una pluma cuando le llegue la hora de su juicio. A mayor derroche más liviandad.
Si su peso vence el fiel de la balanza se hundirá en el infierno del olvido.

Pastillera



—Tomo pastillas para los vértigos, el tiroides, la tensión, el azúcar, la depresión, la circulación de la sangre, los gases, para poder dormir y alguna más para los dolores que tengo repartidos por el cuerpo.
—Abuela eres una drogadicta.
—Ay niña, no me digas esas cosas que suenan muy mal.

Zapatos


Hoy he abandonado mis viejos zapatos. Un millón ochocientos veinticinco mil trescientos cuarenta y siete pasos andados van dentro de ellos. Cientos de calles recorridas y decenas de veces el azar sorteado. Ahora descansan sin mis pies ya para siempre. Un nuevo adiós.

Obsesiones



Escuché en cierta ocasión decir a un poeta que sus temas obsesivos eran el amor y la muerte. Claro, igualito que el resto de los humanos.

Plática en la taberna

17.12.05


«Sospecha de quien diga de sí que es ‘buena gente’. Tener como concepto una conducta bondadosa de uno mismo encierra, al menos, un complejo poético al modo de la máxima machadina soy, en el buen sentido de la palabra, bueno».

Ley antitabaco


—Sabes que a partir del primero de enero no se podrá fumar en la mayoría de
espacios públicos.
— ¿Sí? Vale, tú echa tabaco que fumando se me quitan las penas.

Famosos


Leo (raíz de Leonor) que Hernán Casciari es un argentino que vive en Barcelona y se ha hecho famoso por escribir ‘blogonovelas’, entre otras la archifamosa ‘La mujer gorda’. Revela, entre sus respuestas, que recibe diariamente entre 20.000 y 30.000 visitas, pero con picos de hasta 100.000 (si es verdad, qué mal están repartidos los lectores). También descubre que hizo otra bitácora llamada ‘El diario de Leticia’ (ingenuo de mí que pensé era un texto republicano) para conseguir lectoras entre las amas de casa (que debe pensar que son tontas).
Visto lo visto, o mejor, leído lo leído, animo a los ‘blogueros’ que se quieran hacer famosos que titulen su diarios virtuales con cabeceras significativas como ‘El honor de Leonor’, ‘Fernando Alonso corre a lo bonzo’, ‘Con Operación Triunfo me atufo’, ‘El sodoku me vuelve locu’, ‘La PSP me hace sentirme tan bien’ o ‘La mujer en el espejo me va a volver un pendejo’.

El fondo y la forma

15.12.05

Sabemos la forma del corazón pero y su fondo ¿lo conocemos?

Mal de amores



Tengo un amigo que se queja de mal de amores. Siempre se lamenta de que no le va bien con las chicas. «Todos ligan menos yo», me dice. Y después remata su argumento con un «soy más desgraciado que el ‘Pupas’». Lo que te ocurre, le contesto, es que eres más delicado que los pavillos.
No sé a qué aspira mi amigo pero lo he visto descartar algunas mujeres que se han acercado a su vida en busca de algo más que sexo. Pero esta porque estaba rellenita, aquella porque era muy celosa, la otra porque es un poco pesada, la de más allá porque quiere un compromiso serio. Mientras está en la cresta de la ola no se acuerda de llorar pero en la bajada viene a mí como un perrillo con el rabo entre las patas.
Entonces es cuando más se le acentúa ese estado lastimero que amplifica el eco de su soledad. Lo veo envidar a los emparejados cómo si ese fuera el estado perfecto donde no se carece de nada: compañía, sexo, cariño.
Mi amigo es como un niño: siempre echa de menos lo que no tiene.