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Instrucciones

10.5.22



Mucha gente necesita que las cosas importantes de la vida se las digan personajes muy mediáticos.



Victimario

20.4.22



Existen personas que viven anuladas porque han sido víctimas de su propio personaje.




Acomodos

4.4.22



Al pasar el tiempo, te acostumbras a ser tú porque te sabes de memoria el personaje.



Deformaciones

18.2.21



Cuanto más ensalzas a ciertos personajes más agrandas su esperpento.




Intérprete

9.12.20



Al final constato mi desvarío: no puedo ser otro que el personaje que he sido.




Homúnculos

30.5.20



Mi querido amigo Joselu, fiel lector y comentador de este blog, señalaba ayer que nos somos libres porque nuestra libertad es una proyección de nuestro cerebro. De hecho, advertía, que mis post ya estaban escritos de antemano, aunque yo nunca hubiera imaginado que el post que ahora escribo ya estuviera hecho. Y, por tanto, que ese diez por ciento de consciencia de mi mente se hiciera la ilusión que he decidido, libremente, teclear estas palabras, llegadas a saber de qué rincón de mi actividad mental. El filósofo y neurocientífico, Sam Harris, sostiene que podemos decidir lo que hacemos, pero no podemos decidir lo que queremos decidir hacer, que es lo que supongo que me ha pasado a mí tras poder decidir escribir esta entrada en la bitácora, pero sin poder decidir que quería decidir hacerla.



Últimamente abrazo

24.12.19



Últimamente, me dan ganas de abrazar a las personas conocidas, mirarlas a los ojos y decirles algo amable y sentido. A veces, me fundo en un abrazo cuando, por azar, vuelvo a ver a alguien después de mucho tiempo y por si, acaso, el destino no nos vuelve a cruzar en esta larga despedida.



Casimiro

30.10.18



Cada mañana, al levantarse, se saluda inversamente en el espejo porque ese otro yo que tiene el corazón al otro lado, es el mejor interlocutor que tiene. Con él ejercita las primeras palabras, esas que serán cruciales en las primeras circunstancias de la jornada, el «buenos-días», «cómo-está-usted-esta-mañana», «hoy parece que no va a hacer buen tiempo». Lo hace desde que hace unos años le ocurrió que, tras un monólogo interior de muchas horas, cuando abrió la boca para saludar, se le cayeron las palabras al suelo, por pura pereza de las mismas o porque aún no se habían despertado. Y, por eso, para que no le vuelva a ocurrir lo mismo, desde que abre los ojos parlamenta hasta con su sombra.



Medicaciones

30.5.18



Supo que a su amiga la habían ingresado en el hospital para realizarle una coronariografía y saber cuál era el estado de su exhausto corazón. Con qué alegría sístoles y diástoles lo movían y, sobre todo, si bombea poco o mucho amor. 

Permaneció encamada durante varios días y recibió visitas que le traían ánimos y le traían rosas, estuches con variedades de chocolate y mucha conversación para que no se sintiera sola, algo que apreció de corazón a pesar de su dolencia. En cambio, decidió enviarle cada día un poemita y la poesía curó aquel corazón. 

Los médicos reconocieron, antes de darle el alta, que aquellos versos le dieron otra vez ritmo a su corazón.



Imagen especular

14.1.17



Reconocemos a diario la persona que aparece en el espejo e ignoramos qué personaje oculta la imagen que refleja el cristal.